El presidente del Club Central Norte de Embarcación, Jorge Moya, fue detenido ayer en el marco de una investigación federal por una estafa a personas vulnerables que pugnaban por obtener el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE). También se le atribuye el delito de defraudación a la administración pública. Hay otras dos personas detenidas, una de ellas, la pareja del dirigente del fútbol. La investigación no afecta a los beneficiarios del IFE.

Las detenciones se concretaron en medio de un operativo llevado adelante por la Policía de Seguridad Aeroportuaria, que incluyó allanamientos en distintos puntos de esa localidad, entre ellos la sede del Club Central Norte y la casa de Moya. 

Según informó el Ministerio Público Fiscal federal, la operación fue coordinada por la Fiscalía en lo Criminal y Correccional Federal Nº 12, a cargo de Alejandra Mángano, de Buenos Aires, y la Unidad Fiscal Salta, representada por el fiscal federal Eduardo Villalba. La investigación se abrió en marzo pasado a instancias de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), que hizo la denuncia en Buenos Aires por presuntos hechos delictivos en el  marco de la operatoria del IFE. 

El Ministerio Público Fiscal federal informó que se secuestró también documentación que ahora es motivo de investigación, por lo que no se descartó que surjan elementos que permitan ampliar la persecución penal a otros delitos que se podrían haber cometido, ya sea con respecto al trámite relacionado al IFE o con otros planes y beneficios sociales otorgados por el Estado nacional.

El fiscal Villalba explicó que la denuncia de la Anses reveló “la participación de personas inescrupulosas que les cobraban determinados montos a beneficiarios del bono IFE, en su mayoría pertenecientes a comunidades aborígenes de Embarcación y otros vecinos que desconocían como realizar los trámites”.

Los detenidos están sindicados como las personas que contactaban a los beneficiarios, a favor de quienes realizaban los trámites de cobro del IFE por el sistema de registro de la Anses, gestión por la cual se quedaban con parte del dinero que luego era depositado por el Estado para dichas personas.

El fiscal precisó que los detenidos cobraban entre mil y dos mil pesos por hacer estos trámites, y ese dinero aparecía como pago de aportes o cuotas de los beneficiarios al club, para lo cual primero los afiliaban como socios  del Club. “Esta era la mecánica de la estafa, aunque no descartamos que haya otros hechos similares”, sostuvo Villalba.

El operativo de ayer, con los allanamientos y detenciones, fueron autorizados por el juez Federal de Orán, Jorge Montoya, quien recibió los requerimientos del Juzgado Federal 9, de Buenos Aires. En la investigación hubo también escuchas telefónicas previas.

Por otra parte, el fiscal Villalba aclaró que "la investigación en curso no va a afectar el cobro del IFE, a las personas beneficiadas. Y, sobretodo, debe quedar en claro que no deben pagar ninguna contraprestación por dicho beneficio a nadie".