En un contexto de preocupación frente al crecimiento de los casos de coronavirus en el AMBA durante las últimas semanas, el foco de atención estuvo centrado en los barrios populares del conurbano, especialmente en Villa Azul y Villa Itatí. Estando separadas sólo por el Acceso Sudeste y el brote de contagios en la más pequeña Villa Azul despertó las alarmas por lo que podría significar que el foco se trasladara a su vecina Itatí, un barrio con más de 15 mil habitantes. Por este motivo, mientras Azul mantiene un estricto aislamiento, las autoridades sanitarias realizaron un operativo Detectar en Itatí, en donde se confirmaron un total de 11 casos positivos.

Durante el jueves, autoridades de Nación, Provincia y el Municipio de Quilmes recorrieron, junto a promotores de salud y referentes sociales del territorio, la Villa Itatí con el objetivo de testear y censar a cada una de las familias del barrio. En el marco del programa Detectar --un operativo sanitario de detección temprana de casos de Covid-19 impulsado por el Ministerio de Salud de la Nación--, las autoridades sanitarias visitaron las casas, realizaron un cuestionario epidemiológico e hisoparon a aquellos que tuvieran síntomas del virus. En total se registraron unos 75 casos sospechosos cuyo resultado se conocerá este viernes. Desde el Municipio, sin embargo, insistieron en que la situación en Itatí es "totalmente diferente" a la de Azul. "El índice de positividad en los testeos de casos sospechosos en Villa Itatí es de 8 por ciento, mientras que el 70 por ciento de los casos en Villa Azul se confirmaron", indicó secretario de Salud de Quilmes, Jonatan Konfino.

"Desde lo que pasó en Azul cambió mucho la situación en el barrio. Sólo nos separan 300 metros, así que ahora la gente en el barrio sólo sale para comprar lo justo y necesario y después del resto del tiempo se queda en su casa. Hay más conciencia", comenta Axel, vecino de Itatí e integrante de "Luchemos por ellos", una asociación que trabaja con niñes y adolescentes del barrio, a Página/12. Desde que empezó la cuarentena, sin embargo, Axel comenzó a dedicarse casi exclusivamente a repartir comida a los vecinos y vecinas que se vieron profundamente perjudicados por la crisis social que generó la pandemia. "El año pasado nosotros entregábamos unas 100 viandas, hoy estamos entregando más de 800. Es una barbaridad", manifiesta preocupado. "Pero hay que estar atentos, lo bueno que tenemos es que nosotros estuvimos mucho más prevenidos y estamos tomando muchas medidas de precaución para que esto no se extienda", advierte Axel, a pesar de que admite este cuidado es más posible recién ahora que el agua volvió después de semanas de ir y venir de manera intermitente.

"Hay varios vecinos preocupados y con miedo luego de lo que pasó en Azul, pero es importante destacar que en Itatí no hay un brote y la tasa de positividad del barrio es similar a la del resto de la Provincia. Hay que entender que el foco en Villa Azul se generó porque la gente se ponía a jugar al fútbol a la madrugada en una cancha del barrio. Por eso es tan importante el compromiso y solidaridad de todos los vecinos", explicaron fuentes del Municipio de Quilmes, quienes nuevamente insistieron que la situación entre ambos barrios era diferente. Sin embargo, el vínculo entre ambos barrios es estrecho y muchas de las personas que viven en Itatí tienen familiares o conocidos en el barrio vecino. "Nosotros teníamos muchas familias que venían desde Azul a buscar comida y que ahora no vienen más", confiesa Axel.  

Mientras tanto, Azul continúa en aislamiento estricto y, según datos del Ministerio de Salud de la Provincia, se detectaron 23 nuevos casos de coronavirus, sumando un total de 196 infectados desde que comenzó el brote. Entre las críticas de los vecinos y vecinas persiste la denuncia de que a muchas casas aún no han llegado los bolsones de comida y productos higiénicos, además de los lógicos problemas que genera la obligación de tener que mantenerse encerrado en un barrio atravesado por el hacinamiento, los problemas de acceso a servicios básicos y la falta de urbanización. Desde el Municipio de Quilmes, sin embargo, insisten en que la situación está controlada y en que no existe peligro de que el brote se traslade al barrio vecino. Para probarlo, uno de los datos aportados por la intendencia es un relevamiento realizado por el Organismo Provincial de Integración Social y Urbana que sostiene que no se encontró covid-19 en los líquidos cloacales, lo que permitiría inferir que hay una baja circulación viral en Itatí.

"CONTAGIA SOLIDARIDAD"

La organización villera La Poderosa lanzó la campaña "#ContagiaSolidaridad" con el objetivo de repartir viandas calientes y alimentos frescos a los vecinos y vecinas de Villa Azul, barrio de Quilmes que se encuentra totalmente aislado desde el lunes por un brote de coronavirus. Como parte de la campaña, varios referentes de La Poderosa entregaron el jueves unas 6000 viandas gracias a la cooperación de distintos actores que, a través de donaciones, posibilitaron la ayuda para Azul. "Eso no lo pudimos hacer solos, lo pudimos hacer gracias a ustedes, que nos vienen dando vapor desde que comenzó toda esta película de terror. Ustedes lectores, ustedes actrices, ustedes doctores, ustedes futbolistas, ustedes enfermeras, ustedes monotributistas, ustedes cartoneras, ¡ustedes! Toda esa inmensa masa de comunidad nos permitió articular la solidaridad del pueblo", indicó La Poderosa en un comunicado.