El dólar bolsa marcó una baja de 1,6 por ciento este viernes y se ubicó en 107,71 pesos. De este modo cerró el mes con una merma de 4,1 por ciento. El contado con liquidación anotó una leve suba de 0,6 por ciento y terminó en 113,42 pesos. En mayo acumuló una caída de 1,1 por ciento. Las políticas del Banco Central junto con la Comisión Nacional de Valores, la AFIP y la UIF fueron claves para desinflar los tipos de cambio implícitos en la bolsa.

En contraste el dólar paralelo terminó este viernes con un avance de 0,8 por ciento, al posicionarse en 125 pesos. A lo largo del mes acumuló un incremento de 3 pesos. A mediados de mayo había marcado picos de 138 pesos.

La cotización del dólar comercial cerró en 70,76 pesos y registró un avance de 7 centavos. El tipo de cambio mayorista se ubicó en 68,54 pesos y anotó una suba de 9 centavos. En mayo acumuló un avance de 2 pesos. A su vez, el dólar ahorro -con el recargo del 30 por ciento- cerró el mes en 91,99 pesos.

El Banco Central esta semana reforzó las medidas para mantener bajo control el tipo de cambio. Entre las iniciativas se establecieron tres condiciones para el acceso al mercado único y libre de cambio de las empresas.

La primera es que las firmas con formación de activos externos líquidos deberán usarlos primero para el pago de importaciones o deudas. La autoridad monetaria no regula el uso de las inversiones productivas sino le solicita a las compañías el uso en primera instancia de sus activos líquidos.

Las empresas además tienen la posibilidad de ingresar estos activos al país. Si los depositan en el sistema financiero local pueden acceder al mercado de cambios. Dentro de las nuevas restricciones no se tomará en cuenta el caso de las compras al exterior pendientes por hasta 250 mil dólares, que se vinculan en línea general con el negocio de las Pymes.