La provincia de Buenos Aires firmará este martes un convenio con las Naciones Unidas para que asesore e intervenga en la reforma del sistema penitenciario bonaerense, el de mayor hacinamiento y sobrepoblación del país. El acuerdo lo rubricarán, a las 18, en la sede del Banco Provincia, el titular del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y el ministro de Justicia bonaerense, Julio Alak. El título del convenio es "Asistencia de las Naciones Unidas para la transformación de la gestión penitenciaria", y abarca diversos aspectos, incluyendo los que tienen que ver con los sistema de educación dentro de los penales, la transparencia, el armado de las licitaciones, las estrategias para reducir la violencia y otros.

Como se sabe, en el sistema bonaerense hay casi 51 mil internos con menos de la mitad de las plazas, según denunciaron la Comisión Provincial de la Memoria y el Comité Nacional de Prevención de la Tortura. La situación deriva en motines casi habituales y un cuadro en el que se violan los derechos más elementales.

La ONU supervisará el proyecto que pone en marcha la administración Kicillof y que tiene aristas muy diversas. El gobernador ya anunció un plan de construcción y reforma de unidades, pero el proyecto no puede consistir en sumar cada vez más presos. Por eso, las Naciones Unidas participarán en programas como el denominado “Más Trabajo Menos Reincidencia”, que incluye formación profesional, educación y reinserción de las personas que hayan cumplido la pena. Habrá también instrumentos para la gestión de conflictividades dentro de los penales, orientados a la disminución de la violencia.

Algunas de las más graves irregularidades y humillaciones se producen en la desastrosa calidad y cantidad de alimentación. La idea es que ese sea uno de los primeros proyectos a abordar: la unificación de todo el sistema alimentario en los penales. Para eso se lanzará un llamado a presentar ofertas públicas para implementar un sistema  nutricional con la participación de los internos en el proceso productivo de la comida. La evaluación de los pliegos la harán, en conjunto, el gobierno provincial y la ONU, y lo mismo ocurrirá luego con el control de gestión.