Por la atención restringida y la imposibilidad de emitir nuevas licencias, la municipalidad de Salta, de acuerdo con la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), emitió una nueva prórroga para la validez de las licencias nacionales de conducir que vencieron durante el período de aislamiento, que comenzó el 20 de marzo en Argentina.

De esta manera, las licencias que hayan caducado después del 13 de marzo y hasta el 15 de junio, continuarán vigentes por 120 días más, según lo que explicó Gilberto Pereyra, titular de Movilidad Ciudadana.

Igualmente dentro de ese período de postergación se encuentran todas las licencias vencidas desde el 15 de febrero, ya que se encontraban dentro del plazo permitido para su renovación una vez vencidas cuando comenzó la pandemia. La medida también abarca a la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (Linti).

En el caso de extravío de la licencia nacional de conducir, se debe realizar la denuncia correspondiente en sede policial y portar la constancia de la denuncia en el vehículo, junto a la versión digital de la licencia que se puede gestionar en la app Mi Argentina.

Quienes quieran obtener por primera vez su licencia de conducir deberán esperar a la reapertura de los Centros de Emisión de Licencias (CEL), y aquellos que hayan hecho los cursos y exámenes psicofísicos exigidos para el otorgamiento y renovación de licencias, también cuentan con una prórroga por el término de 110 días.

Multas solo con autorización expresa

En tanto, en la Secretaría de Movilidad Ciudadana finalmente continúan las restricciones para que los agentes de tránsito municipal realicen actas de infracción, tal como lo estableció Pereyra en la resolución 01 de esa dependencia con fecha del 1 de junio.

En su artículo primero dispone que el personal de la Secretaría asignado a cumplir tareas en la vía pública deberá cubrir funciones de prevención, direccionamiento, regulación y ordenamiento del tránsito vehicular en general, y del peatonal, además de todas las tareas de señalización relacionadas a la Seguridad Vial.

Pero luego establece que queda prohibido labrar actas de infracción sin autorización expresa de la Secretaría y que la fiscalización y detección de infracciones en la vía pública, con la confección de actas de infracción respectivas, se desarrollarán en el marco del convenio suscripto con el gobierno la Provincia de Salta.

Por lo tanto el personal que se utilizará será el de la Dirección de Seguridad Vial dependiente de la Policía de la Provincia y siempre bajo dependencia y estrictas directivas de esta Secretaría de Movilidad Ciudadana.

Por último, la resolución reserva para Movilidad Ciudadana el determinar en cada caso la zona, los lugares específicos y las condiciones en que se desarrollarán los procedimientos de control de tránsito.

De esta manera Pereyra nuevamente impone una medida que va en la línea de aquella que tomó cuando todavía con el rango de subsecretario prohibió mediante un memorandum el 27 de mayo los controles y las multas por tiempo indeterminado, entre otros motivos por la cantidad de personal afectado por la excepción laboral al ser grupo de riesgo si contraen el coronavirus.

Tras protestas de los propios agentes y reclamos de los concejales, el coordinador Jurídico y Legal de la municipalidad, Daniel Nallar, desestimó la validez del memo, y esto llevó a que el titular de la subsecretaría anuncie su renuncia.

En ese momento recibió un espaldarazo de la intendenta Bettina Romero, que resolvió jerarquizar la Subsecretaría y la elevó al rango de Secretaría, con Pereyra a la cabeza, lo que parecía públicamente una compensación a la marcha atrás a la que fue obligado el funcionario.

Pero nuevamente el lunes, el ahora secretario tomó esta primera medida, que no es tan restrictiva como la anterior en la que directamente suspendía operativos y multas, sino que deja abierta la posibilidad de que se realicen pero solamente bajo estricta tutela.