La vicepresidenta Cristina Kirchner publicó un video en su cuenta de  Twitter en el que habla de su experiencia en Lomas de Zamora, donde el lunes se presentó ante el juez Federico Villena, quien le mostró las pruebas del espionaje ilegal en su contra que se  desarrolló durante el macrismo. "La asociación ilícita eran ellos", se titula el video en el que la expresidenta habla del material que le fue exhibido. "Hace dos días, confirmé lo que siempre supe y lo que en definitiva siempre denuncié. Durante dos horas y media, escuché las explicaciones del juez y de la fiscal de la causa de Lomas de Zamora, donde se descubrió una real y verdadera asociación ilícita que como tal tenía por objeto la comisión de diversos delitos, todos los necesarios para perseguir opositores", dijo la ex senadora.

"Mientras el juez de la causa nos explicaba y demostraba sobre un pizarrón la articulación entre narcotraficantes, agentes y funcionarios de la AFI; policías de la Ciudad de Buenos Aires, agentes y funcionarios del Servicio Penitenciario Federal; agentes de la PSA, periodistas; denunciadores seriales y hasta una alta funcionaria de la Unidad Presidencial de Mauricio Macri pude enterarme cómo se abrió la trama más escandalosa de la que se tenga memoria en tiempos de democracia y cuya investigación recién comienza" afirmó la vicepresidenta.

"Mientras escuchaba las grabaciones que hablaban de los seguimientos sobre mi persona, sobre el Instituto Patria y también sobre Unidad Ciudadana --aquella fuerza política que construimos en el 2017 y que fue verdaderamente punta de lanza contra todo esto-- no podía dejar de pensar en Máximo y en Florencia, que están acusados de formar parte de una asociación ilícita conmigo, su madre, como jefa", sigue el video.

"Qué increíble ¿no? Pensar que armaron cuatro causas en Comodoro Py por cuatro asociaciones ilícitas diferentes en las que por supuesto, como no podía ser de otra manera, me acusaban de ser la jefa. Ahora entiendo el por qué. Esa obsesión con las asociaciones ilícitas. Estaba proyectando lo que ellos eran y hacían. Una verdadera asociación ilícita. Casi, casi para Freud. Lo de la proyección, digo", continuó la ex mandataria.

"Párrafo aparte merece el capítulo del espionaje que desplegó el Servicio Penitenciario Federal en la cárcel de Ezeiza. Algo verdaderamente impresionante. Pensar que desde el 10 de diciembre pasado, algunos medios hegemónicos venían planteando nuestras diferencias con quienes continuaron en esos cargos del servicio como una cuestión de poder o de lucha interna. Como siempre dije: todo hace juego con todo. Y creo que todo esto ha sido más que cobertura mediática de los medios hegemónicos. Es complicidad política con todo lo que pasó en Argentina", expresó Cristina Fernández.

Finalmente, la vicepresidenta se preguntó sobre si se abriga la esperanza de conseguir justicia. "El lunes pasado, antes de irme del juzgado y después de todo lo que vi y escuché, decidí constituirme como querellante en esa causa. ¿Qué si tengo alguna expectativa de  que se haga justicia? La verdad es que a esta altura no sabría qué contestar. Pero sí. en el fondo espero que sea así", reflexionó.

El lunes, la vicepresidenta fue a Lomas de Zamora acompañada por su abogado Carlos Beraldi, e inauguró lo que será un largo desfile de las víctimas de los seguimientos encabezados por la Agencia Federal de Inteligencia durante el gobierno de Mauricio Macri. El juez, junto a la fiscal Cecilia Incardona le dieron una extensa y detallada explicación sobre las maniobras encabezadas por un grupo de al menos dieciocho personas. Integrado por policías, agentes, abogados, periodistas, policías bonaerenses, narcos y barras bravas, la banda de espionaje paralelo se llamaba a sí misma “SuperMarioBros” y reportaba a Alan Ruiz, hombre fuerte de la AFI y con lazos con Patricia Bullrich. Parte de la información clandestina se la pasaban a periodistas.