En marzo de 2016, la asesora legal del Obispado de Reconquista Gabriela Contepomi le aconsejó al sacerdote Néstor Monzón, investigado por abuso sexual gravemente ultrajante de un niño y una niña, que "borre todo", en relación a llamadas y mensajes que pudiera tener en su celular. Cuando los audios salieron a la luz, el fiscal Alejandro Rodríguez la imputó por el delito de encubrimiento agravado. Ambas causas se tramitaron de manera separada en la justicia del norte provincial. En diciembre pasado, el párroco de la iglesia María Madre de Dios fue condenado por los delitos contra la integridad sexual, cometidos a fines de 2015. La asesora, en tanto, estaba sobreseída en primera y segunda instancia por el encubrimiento, pero la Corte ordenó la semana pasada "anular" esa decisión y que continúe la investigación en su contra, por lo que quedó a un paso de ir a juicio. El fiscal Rodríguez confirmó a este diario que sólo resta que se designe tribunal y se ponga fecha al debate. La pena que enfrenta sería de cumplimiento condicional.

A Monzón le dieron 16 años de prisión, en diciembre pasado, tras un juicio oral en el que se ventilaron las pruebas en su contra, por hechos cometidos contra dos menores que son primos entre sí. Fue el fiscal Rodríguez quien instruyó las dos investigaciones, y tras la condena contra el párroco busca que el accionar de la asesora del Obispado -que no era defensora del religioso- no quede en la nada. Con la convalidación de la causa, por parte del máximo tribunal santafesino, sólo resta ponerle fecha y designar tribunal para juzgarla.

Cuando se inició la causa contra Monzón, desde la Fiscalía se informó al Obispado de Reconquista sobre el inicio de la investigación ante la denuncia presentada por la madre de una de las víctimas de abuso, sobre los propios dichos de ésta. Tiempo después se conocieron audios en los que Contepomi se comunicó con Monzón para pasarle el parte de la investigación en curso, por la que fue detenido en abril de 2016. La evidencia que consta en el expediente es clara para el fiscal Rodríguez. Se trata de escuchas telefónicas en las que la asesora le sugiere que "borre todo", en relación a elementos que habría en su celular. Frente a la situación, la acusaron de "haberlo ayudado a hacer desaparecer prueba". 

Con el correr del tiempo, la abogada logró un sobreseimiento por parte del juez Gonzalo Basualdo, que fue confirmado por el camarista Carlos Renna. "La defensa sostuvo que cuando asesoró al sacerdote ejerció un acto de defensa técnica, pero nosotros entendemos que no fue así", dijo el fiscal. Rodríguez insistió con un recurso extraordinario -tras la audiencia preliminar- y el caso llegó a la Corte provincial. En un fallo de la semana pasada, el máximo tribunal santafesino resolvió "anular" lo resuelto y que "se continúe con la investigación de la conducta atribuida a la imputada".

El caso del religioso de 51 años fue juzgado en los últimos días del año pasado, en medio de movilizaciones de organizaciones que sostenían que "les niñes no mienten". El pedido de pena de 16 años fue solicitado por la querella que representa a la familia de las víctimas, que tenían tres años al momento de los hechos. Poco después, "la Santa Sede, a través de la Congregación para la Doctrina de la Fe, determinó la dimisión del estado clerical de Néstor Fabián Monzón", según expresaron en aquel entonces desde la diócesis de Reconquista.