Las empresas de software proyecta para 2020 un crecimiento de 19,6 por ciento en su facturación en pesos nominales y de 2,6 por ciento del empleo, lo que equivaldría a 2.500 puestos nuevos de trabajo, según datos del reporte anual realizado por la Cámara de la Industria Argentina del Software. En el sector afirman que para ello es necesario que el Congreso avance con el tratamiento de la nueva ley de Economía del Conocimiento.

Si bien las expectativas tanto de crecimiento de ventas de servicios como de contratación de empleados hacia fines de abril se redujeron más que el doble con respecto a las relevadas en marzo, un aumento en el plantel laboral llama la atención en el contexto de pandemia mundial. La actividad tiene su propia dinámica pero no escapa a los vaivenes macroeconómicos. 

En pleno 2020, el rubro de la industria del Software no necesita mucha presentación. El sector cumple con todos los requisitos para aportar al crecimiento de la economía: es intensivo en un tipo de trabajo bien remunerado porque exige un nivel medio o alto de calificación; produce servicios transables y competitivos para el mercado global; y aporta al aumento de la productividad en el resto de la economía gracias a la propia naturaleza de la actividad: generar y difundir conocimientos para hacer más eficientes otro tipo de actividades económicas. 

En lo referido a los puestos de trabajo y salarios, la industria estima que el 46 por ciento de los recursos laborales que demandará en 2020 serán para cubrir puestos con mucha experiencia (Semi Senior), el 30 por ciento Senior y el 24 por ciento restante Junior. En los últimos años la oferta de recursos calificados llegaba a cubrir la mitad de los recursos demandados. Sin embargo, se estima que este año no habrá inconvenientes para satisfacer la totalidad de los 2.500 empleos. 

En marzo, el ingreso promedio de un trabajador del sector de categoría Senior era de 92.780 pesos, un Semi Senior de 64.400 pesos y  un Junior 44.300 pesos. Más del 56 por ciento de las SSI no piensa dar aumentos durante el primer semestre o espera aumentar menos del 15 por ciento.

Ley de Economía del Conocimiento

El sector es considerado estratégico desde el 2004, cuando el gobierno decretó la Ley 25.922 de Promoción de la Industria del Software por diez años y permitió el desarrollo exponencial de la industria del Software en el país. El año pasado fue aprobada la Ley de Promoción de la Economía del Conocimiento que significó una continuidad con respecto a la anterior a la vez que incorporó varios avances acordes a la época. La nueva ley amplió sus beneficios a nuevas actividades más allá de las estrictamente dedicadas al software, como la robótica e inteligencia artificial, biotecnología y servicios profesionales de exportación. También se actualizaron varios de los beneficios fiscales.

El gran problema que tenía esa ley es que no ponía límites a las empresas que recibirían esos beneficios. De esta manera, compañías que naturalmente no necesitarían el apoyo del Estado para funcionar, como Mercadolibre o Globant, contaban con excenciones fiscales. En enero, el gobierno suspendió la vigencia de esta Ley y conformó un nuevo proyecto que se encuentra listo para ser tratado. 

Esta variable resulta ser clave al momento de relevar las expectativas del sector. De no implementarse rápidamente, las empresas proyectan una caída del 11 por ciento en el empleo, 6 por ciento en la facturación, 2 por ciento en las exportaciones y 17 por ciento en las inversiones en I+D+i, sobre las expectativas originales. 

El gobierno ve al sector como clave dentro de la economia. Durante un ciclo virtual empresarial, el ministro de Desarrollo Productivo, Matias Kulfas, se refirió a cuál será la agenda productiva que mantendrá el gobierno a largo plazo. Dijo que pondrán la lupa en la economía del conocimiento, “uno de los pocos que creó empleo durante la pandemia”, y que será una “gran fuente de exportaciones”. Además, se buscará “agregar valor” a las cadenas de la agroindustria, los hidrocarburos y la minería, con el objetivo de “generar divisas” y a la vez desarrollar el mercado interno. También el Ministerio trabaja en un plan de electromovilidad y en el desarrollo de la cadena del litio.