A diferencia de los equipos considerados "grandes", donde la incertidumbre se limita a tres o cuatro jugadores que pueden quedar libres, en el resto de los clubes, la inestabilidad es mucho mayor. Tal es el caso de Arsenal, animador de la última Superliga en su vuelta a Primera División, que encaró el parate con la friolera de 19 futbolistas de su plantel con contratos a vencer este martes. Entre ellos, hay más de medio equipo titular del elenco que comanda Sergio Rondina.

"La prioridad es mantener una base del plantel. Con unos se podrá contar y con otros, no. Pero no creo que tengamos un mercado de pases fuerte. Veremos si podemos incorporar, pero por cómo viene la mano vamos a esperar un poco", le explica el DT a Líbero.

La inclusión de juveniles en los próximos torneos -ante la suspensión de los descensos y la crisis- se hará notar y Arsenal no es la excepción. "Seguramente le demos rodaje a varios de los chicos del club que venían alternando y ya estaban en el plantel", explica Rondina, rápido de reflejos para reaccionar ante las "avivadas" de los clubes más poderosos. "También sumaremos quizá a algún chico de Sexta División, que le hicimos contrato porque algunos pillos se lo querían robar", alerta.

Por el momento, Arsenal se aseguró la continuidad de dos emblemas como el arquero Maximiliano Gagliardo y el lateral Emiliano Papa, mientras confirmó las salidas de Rubén Zamponi, Joel Soñora, Ezequiel Rescaldani, Ezequiel Cerica -no se les renovó- y Gastón Alvarez Suárez, la gran figura del mediocampo, que emigraría al fútbol de Emiratos Arabes Unidos. En tanto, quedan por definir los vínculos de, entre otros, Franco Sbuttoni, Fernando Torrent, Emiliano Méndez, Juan Kaprof y Juan García, todos habituales titulares.

"Hablé con los dirigentes sobre el tema. Hablé con los que quería que se queden y con los que no, también. De la misma manera. Pero es una decisión del jugador, de tomar la mejor decisión que a ellos les parezca. Hoy es muy difícil competir, no te digo con el mercado local, sino con el de afuera. La diferencia cambiaria es muy grande", relata el entrenador de 47 años, que renovó recientemente por año y medio para seguir en Sarandí.

Por último, Rondina se refiere a algunas de las innovaciones reglamentarias que pueden llegar con la vuelta del fútbol, algo que prevé recién para fines de octubre. "Los cinco cambios vendrían bárbaro cuando los equipos jueguen copa, entresemana. Ahí sí, pero en el torneo local van a beneficiar a los equipos grandes, con planteles largos. La mitad del equipo te puede cambiar el rumbo del partido. Si lo pueden hacer tres, imaginate cinco", sentencia el conductor de una de las gratas sorpresas del último torneo.