Un total de 35 personas fueron aprehendidas ayer al mediodía en la zona oeste de la ciudad por participar de una fiesta electrónica en una casa particular, violando las disposiciones relativas a la cuarentena. De acuerdo a lo que detalló a este diario el fiscal que investiga el caso, Gustavo Ponce Asahad, se trata de 20 varones y 15 mujeres de entre 20 y 25 años que ahora deberán afrontar un proceso penal.

Según informaron desde fiscalía, cerca de las 11 de ayer, diferentes llamadas de vecinos al 911 dieron aviso de que se escuchaban ruidos molestos y música fuerte provenientes de un inmueble ubicado en calle Campbell al 2900, en una zona vulnerable de la ciudad. Ante estas denuncias, la policía se hizo presente en esa residencia particular y constató que se estaba realizando un encuentro privado que violaba las normativas dispuestas en el marco de la pandemia.

De esa manera, el fiscal de la Unidad Especial por infracciones a la legislación por coronavirus, Gustavo Ponce Asahad, ordenó la aprehensión de todas las personas que se encontraban en el domicilio. En contacto con Rosario/12, el funcionario judicial adelantó que estos 35 jóvenes, que ya fueron identificados, serán imputados por los delitos previstos en los artículos 205 y 239 del Código Penal. En el caso del 205, prevé penas de prisión de seis meses a dos años al que “violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia”; mientras que el artículo 239 establece que “será reprimido con prisión de quince días a un año, el que resistiere o desobedeciere a un funcionario público en el ejercicio legítimo de sus funciones o a la persona que le prestare asistencia a requerimiento de aquél o en virtud de una obligación legal”.

Al mismo tiempo, Ponce Asahad mencionó que en el caso del dueño de la propiedad, quien se encuentra entre los aprehendidos, también se le va a imputar la figura de “instigación a cometer un delito” por ser el organizador del evento. Vale mencionar que el inmueble del hecho es una vivienda familiar pero al momento de la fiesta no se encontraban los padres del joven. Paralelamente, a uno de los participantes se le sumará una imputación por el delito de resistencia a la autoridad, por tener una “actitud hostil” -según la describió el fiscal- con los agentes de policía que acudieron al lugar.

Otro de los datos que aclaró a este medio el funcionario judicial es que no se encontraron drogas en el domicilio pero sí varias botellas de alcohol. Además, explicó que dispuso que se chequeen los antecedentes penales de cada uno de los aprehendidos y sus informes médicos, se tomen muestras fotográficas del lugar y que se realice un relevamiento de la escena del hecho.