La Municipalidad de Córdoba desalojó un evento de música electrónica en el complejo Pinar del Río donde participaban más de 150 personas, sin respetar el distanciamiento social y, muchos de ellos, sin barbijos ni tapabocas. Los efectivos que desplegaron el operativo en la zona ordenaron además la imputación de los dueños del restobar por violar la cuarentena. Si bien en la ciudad se flexibilizaron algunas medidas de aislamiento y reabrieron bares, confiterías y restaurants, este desconfinamiento se hizo bajo un estricto protocolo sanitario, incumplido por los organizadores de la fiesta.

El hecho ocurrió este jueves, en un predio privado de Villa Warcalde, en el Complejo Pinar del Río libre. El evento, promocionado en las redes sociales, se anunciaba como “Music, food, Drinks & friends”. Los organizadores prometían la participación de tres reconocidos dj cordobeses y una ambientación especial en el lugar, dado que la fiesta se desarrolló en un parque de dos hectáreas con livings ambientados para pasar la tarde con música en vivo y gastronomía.

Este viernes, el director de Espectáculos Públicos, Julio César Suárez, contó que acudió al lugar tras recibir varias denuncias de vecinos, además de ver fotos y videos que daban cuenta de un encuentro con una gran cantidad de personas. El funcionario relató que primero habló con los encargados del local y les explicó la necesidad del distanciamiento de mesas, no más de seis personas por mesa, entre otros puntos.

Según las fuentes judiciales, el local tenía también la habilitación municipal vencida y no cumplía los requisitos exigidos para funcionar en el marco de la pandemia de Covid-19.

"Me generó dudas porque no se condecía lo que veía en ese momento con las fotos que me habían enviado", expresó Suárez que se retiró del lugar, esperó unos 20 minutos y volvió a ingresar. "Todo había cambiado: había un DJ, la música estaba fuerte, la gente estaba circulando por todas partes sin barbijo, los grupos eran de diez o más personas", detalló el funcionario. Suárez comentó que el desalojo se realizó luego sin mayores inconvenientes porque "se comprendió que estaba en juego la salud de los que habían asistido al evento".