"A estas hay que matarlas a todas", dijo un policía de 43 años antes de golpear brutalmente a su pareja, mientras miraban la noticia sobre el femicidio de Rocío Vera, en Reconquista. Ocurrió el miércoles por la noche, en una vivienda de la localidad santafesina de Santo Tomé. El golpeador quedó detenido y en disponibilidad. Por la agresión, la víctima perdió un diente y terminó con fractura de tibia y peroné. Tras el hecho, la propia mujer salió a contar lo sucedido y dijo que el agresor no le permite tener contactos con su familia y otras personas. 

Juan Pablo Poletti, director del Hospital Cullen, indicó que la paciente llegó "con una fractura de tibia y peroné, que requerirá cirugía, y escoriaciones múltiples en la cara y cuero cabelludo. La paciente nos contó que había sufrido un hecho de violencia de género y en ese momento se activó el protocolo", dijo el médico, en LT10.

El relato de la mujer, es estremecedor. "Yo estaba por preparar la comida, y el dijo 'hay que matarlas a todas porque se lo merecen...', entonces le respondí que no diga así porque él tiene hijas; y se levantó de golpe y me atacó: me empezó a pegar puñetes en la cabeza", relató en el móvil de la emisora santafesina. "Cuando me caigo, me agarra de atrás y me hace como la tijera con las piernas. Ahí sentí el tirón en la rodilla y no me podía levantar; yo gritaba del dolor y me pegó una patada en la boca que me quiebra un diente. Cuando me vio tirada se asustó y se mandó a mudar. Hace un año y tres meses que estamos juntos y cuando toma es agresivo. También era así con otras parejas. Es obsesivo, posesivo. Me regaló el teléfono y no tenía contactos, me sacó de mi familia, hasta me ha dejado encerrada", describió la víctima sobre el calvario con el agente que quedó detenido.