Fondos para infraestructura, incentivo para los viajeros y el sostenimiento de las ATP por lo menos hasta fin de año, son algunos de los ejes que tiene el proyecto de ley que trabajan diputados nacionales del oficialismo con el Gobierno para auxiliar al sector turístico, uno de los más afectados por la pandemia, y que tiene perspectivas de recuperación inciertas a futuro.

Si bien la iniciativa ya cuenta con dictamen de las comisiones de Turismo y Defensa del Consumidor, para que se habilite su tratamiento en el recinto falta que se expida Hacienda, requisito imprescindible cuando se trata de proyectos que involucran al erario público tal como sería el caso de un régimen extraordinario de emergencia.

Uno de los motivos por lo que dicha comisión todavía no redactó el dictamen es por el cambio de escenario tras el acuerdo con los acreedores externos, que resulta ahora más favorable y holgado al momento de diseñar un plan de rescate para el sector. Inclusive se especula con un anuncio del presidente Alberto Fernández con novedades para el turismo.

Según explicó el diputado salteño Lucas Godoy, integrante de la comisión de Defensa del Consumidor, el proyecto tiene cuatro ejes planteados para la recuperación del sector.

El primero se trata de un programa de pre ventas turísticas orientado a fomentar y potenciar el turismo nacional, para lo que se entregarán desde el Estado cupones de crédito a las familias que compren paquetes turísticos antes de fin de año. El monto llegaría hasta un 50% en créditos del producto adquirido.

“Con esto se busca se busca reactivar el turismo desde ahora, generando ingresos ya, pero para que se viaje en el 2021 cuando, esperemos, ya se pueda”, señaló Godoy.

También se dispondrán fondos específicos para las provincias y municipios para la financiación de proyectos de infraestructura con el objetivo de mejorar y diversificar la oferta, fomentar la desestacionalización turística y la reactivación del turismo, según expresa el artículo 8 del proyecto.

Otro eje es el auxilio directo a Micro, Pequeñas y Medianas Empresas del sector y para prestadores turísticos monotributistas, autónomos e independientes, para su sostenimiento económico, la capacitación de los recursos humanos y la mejora de la oferta del servicio turístico, principalmente mediante créditos subsidiados.

A partir de ese punto se contempla la extensión de los ATP, con los que el Estado cubre parte de los sueldos de las empresas, hasta por lo menos fin de año, debido a que se estima que para estos meses la actividad continuará muy afectada por la pandemia.

En Salta, si bien se habilitó el turismo interno, el movimiento que este genera representa solo un 12% del total de visitantes que circulan habitualmente por la provincia. De allí que principalmente desde el sector hotelero consideran esencial sostener el sistema de las ATP, para poder atravesar la crisis sosteniendo los planteles de empleados, según manifestaron en reiteradas oportunidades desde la Cámara de Turismo salteña.

El último punto involucra también a los turistas, debido a que intenta proteger las eventuales compras de paquetes y pasajes que no se hayan podido utilizar a causa de la pandemia, para lo que prevé distintas opciones, como la reprogramación, la entrega de vouchers que pueden ser transferibles y la devolución del dinero, aunque mediante un sistema de cuotas, para evitar el desfinanciamiento de los emprendimientos turísticos.

En ese artículo del proyecto se otorga un período de 18 meses desde que se levanten las restricciones a la circulación para poder hacer las reprogramaciones o utilizar los vouchers.

Nacional y provincial

Cuando se apruebe, esta ley se complementará con la emergencia turística ya vigente a nivel provincial, que fue aprobada hace un mes por la Legislatura.

Los prestadores turísticos salteños se ven beneficiados con la exención del pago del impuesto a las actividades económicas y del impuesto al sello para el período 2020, el diferimiento de los mismos conceptos en un 50% para el ejercicio de 2021, las suspensiones de diferentes cánones, y el asesoramiento y apoyo del estado provincial para gestionar tarifas diferenciales ante las empresas de servicios y avales o herramientas para el acceso a créditos o al mercado de capitales.

La caída absoluta del turismo desde fines de marzo, representó para Salta perder uno de los pilares económicos, ya que en los últimos años se registraron 2 millones de visitantes, con el consiguiente impacto económico.

Este verano la provincia había registrado un alza en la cantidad de personas que habitualmente llegan para esa época, y solo entre enero y febrero había alcanzado un impacto económico de 1800 millones de pesos.

Cambiemos de arrebato

Durante la sesión del martes de la Cámara Baja en el Congreso, a instancia de la diputada salteña Virginia Cornejo, Juntos por el Cambio intentó forzar el tratamiento sobre tablas del proyecto que presentaron desde esa bancada, y que también venía avanzando con dictámenes en las comisiones de Turismo y Defensa del Consumidor.

Al igual que la iniciativa del oficialismo, carece del dictamen de Hacienda, y por ese motivo, además del intento de pasar por arriba del otro proyecto que cuenta con dictamen de mayoría, la propuesta de Cornejo obtuvo solo 122 adhesiones, cuando necesitaba por lo menos 189 votos.

El proyecto de Juntos por el Cambio promueve principalmente medidas de exenciones de impuestos y beneficios fiscales y laborales, por lo que la iniciativa se enfoca únicamente en los prestadores de turismo, a diferencia del proyecto oficialista que contempla también a los turistas.

Uno de los sostenes del proyecto impulsado por el Frente de Todos, es el propio ministro del área, Matías Lammens, que a su vez consiguió el apoyo de la Cámara Argentina de Turismo, que realizó sugerencias que luego fueron introducidas en la redacción final del articulado que tuvo dictamen.