El mundo entero estaba esperando la reacción de Estados Unidos ante el reciente anuncio del gobierno ruso sobre la vacuna “Sputnik” . Después de sus promesas inconclusas sobre el desarrollo de una fórmula propia, el Gobierno de Donald Trump ahora indicó que “lo importante no es ser el primero en tener una vacuna, sino que sea segura y efectiva”, en un intento por minimizar el avance científico logrado por Moscú.

Vladimir Putin le robó el show a Trump, quien ayer mismo había prometido que a fin de año estaría lista la vacuna estadounidense. "El presidente está recibiendo información actualizada sobre la vacuna aquí en la Casa Blanca hoy, y estoy segura de que lo anunciará en un evento abierto a la prensa y también posiblemente en su conferencia de prensa más tarde", había dicho ayer la asesora de la Casa Blanca, Kellyanne Conway en una entrevista con Fox News.

Una semana antes Rusia había confirmado el éxito de sus pruebas con “Sputnik”, la vacuna desarrollada por el Centro Gamaleya de Moscú probada en un grupo de militares voluntarios. Según había informado Rusia, los participantes desarrollaron anticuerpos contra el coronavirus tras someterse al tratamiento. 

Ya en su momento Kirill Dmitriev, director del fondo de riqueza soberana de Rusia, recordó la carrera espacial en la que compitieron la URSS y Estados Unidos para afirmar que Rusia quería adelantarse a la vacuna estadounidense . "Es un momento como el del Sputnik", había dicho. Precisamente ese fue el nombre que hoy el gobierno ruso le dio a la vacuna, que demostró ser “eficaz” y ofrece una "inmunidad duradera", según afirmó hoy Putin.

Con la carrera perdida, ahora el secretario de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Alex Azar, afirmó que lo importante no era ver quién llegaba primero a la meta. "Necesitamos datos transparentes, tienen que ser datos de fase 3 que demuestren que la vacuna es segura y efectiva y eso es lo que el presidente (Donald) Trump está haciendo con seis vacunas en desarrollo", subrayó.

Se espera entonces que a lo largo del día Trump brinde la conferencia de prensa prometida sobre los avances estadounidenses hacia la vacuna contra la Covid, con los ojos del mundo puestos en Moscú. 

Azar dijo que Estados Unidos “está en camino” de tener decenas de millones de dosis de su propia versión de la vacuna para diciembre, con dos de las seis que se desarrollan en el país en fase tres, la etapa final de ensayos clínicos.

“Es muy posible que tengamos múltiples vacunas que darán resultados y podríamos tenerlas autorizadas o aprobadas por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) para diciembre”, dijo el secretario desde Taiwán, donde viajó para interiorizarse de la estrategia de la lucha contra el virus, en la primera visita de un funcionario de primera línea de Estados Unidos a la isla en décadas.