Kellyanne Conway, asesora del presidente estadounidense Donald Trump y una de las más fervientes defensoras públicas de su gobierno, anunció que dejará su cargo a fin de mes alegando cuestiones familiares. Conway tuvo un papel clave en la campaña que llevó a Trump a la Casa Blanca en 2016. A poco más de dos meses de las próxímas elecciones presidenciales y en el inicio de la convención republicana que oficializará la postulación de Trump para buscar la reelección, Conway dio a conocer su sorpresiva decisión. George Conway, esposo de la asesora y líder del Proyecto Lincoln, un colectivo formado por republicanos críticos del actual mandatario, también anunció que abandonará sus funciones.

“Es mi decisión y mi voz. A su debido momento, anunciaré planes futuros. Por ahora, y para mis queridos hijos, seré menos drama y más mamá", explicó Conway a través de un comunicado. “Como millones de padres saben, los hijos que asisten a clase desde casa requieren un nivel de atención y vigilancia poco habitual en estos tiempos", indicó la asesora en referencia a las restricciones por el coronavirus. 

"A pesar de todas sus diferencias políticas, este es un hermoso país lleno de gente increíble", remarcó Conway, formada en derecho. Su anuncio marca un abrupto final en la carrera de la asesora en la Casa Blanca, donde se ganó la fama de ser una de las defensoras más feroces y controvertidas del presidente. Consiguió su puesto en 2016 después de convertirse en la primera mujer gerente de campaña en ganar una carrera presidencial.

George Conway, un abogado de Washington que fue considerado para ocupar distintos puestos en el Departamento de Justicia al principio del mandato de Trump, emergió rápidamente como un gran crítico de la gestión del presidente. El abogado llegó a pedirle al Congreso que eliminara el "cáncer" de Trump de la presidencia y cuestionó abiertamente la salud mental del presidente. Hasta este momento lideraba el Proyecto Lincoln, un grupo de republicanos descontentos con el actual mandatario reunidos bajo el lema "Nunca Trump".

Trump, de hecho, no dudó en criticar públicamente al marido de su asesora, al decirle que era "un perdedor total" y que estaba "celoso" de su esposa. El mandatario no se pronunció públicamente sobre la salida de su aliada. Fuentes citadas por NBC News aseguraron que Conway tomará la palabra el miércoles en la convención nacional republicana, tal como estaba previsto.