(Desde Santa Fe) El gobernador Omar Perotti felicitó ayer a su ministro de Seguridad, Marcelo Sain, porque su denuncia ante la justicia federal comenzó a destapar la trama oculta por el asesinato del empresario Hugo Oldani, el 11 de febrero. La pesquisa del homicidio estaba a cargo de la fiscal Cristina Ferraro, quien fue apartada de la causa por el fiscal regional de Santa Fe, Carlos Arietti. Ahora se sabe por qué. Ayer, el fiscal federal Nº 2 Walter Rodríguez –que investiga la denuncia de Sain- imputó a Ferraro por supuesto “encubrimiento agravado” por la desaparición de “pruebas, rastros e instrumentos del delito” en la escena del crimen. Una de esas pruebas es una fortuna en efectivo: 1.100.000 dólares y 3.050.000 pesos, según un estudio realizado por la Policía Federal sobre fotografías de la plata que operaba Oldani, que es lo único que quedó. “Una suma de dinero injustificada a la luz de la actividad general de la empresa de turismo” alertó el fiscal federal. “Son cosas muy groseras como para mirar para otro lado y eso no lo vamos a hacer. Vamos a acompañar plenamente el avance” de la causa. En Santa Fe, "se terminó la vista gorda” y la “complacencia” con el delito, ratificó Perotti.

La investigación trascendió el martes por un “oficio de carácter reservado” que el fiscal Rodríguez remitió a Sain para anoticiarlo que Oldani “manejaba dinero que correspondería a la Policía de Santa Fe, específicamente de la Unidad Regional I y de la Policía Motorizada”. La hipótesis surgió en “entrevistas” de los investigadores de la Policía Federal a testigos de comercios aledaños a la galería comercial donde operaba el empresario asesinado. "Informo a usted –le dijo el fiscal al ministro- los elementos incorporados a la causa” para el caso de entender necesario iniciar actuaciones administrativas y “despejar posibles responsabilidades” de las cúpulas de la Unidad Regional I y de la Policía Motorizada.

El gobernador Perotti estaba al tanto de los hechos cuando le preguntaron por la denuncia de Sain y la trama que comienza a ventilar el fiscal Rodríguez. “El caso Oldani es una demostración cuando decimos que queremos cortar todos los vínculos (del Estado con el delito) y generar una condición nueva de mirar más allá. Claramente son cosas muy groseras como para mirar para otro lado y eso no lo vamos a hacer”, advirtió el mandatario por la emisora Aire de Santa Fe.

“Quizás esto terminaba con una marcha (de protesta por la inseguridad) que le hacían al gobernador pidiéndole justicia y una reunión recibiendo” a los manifestantes. Más, la promesa de que “íbamos a hacer los mayores esfuerzos” para llegar a la verdad. “Se siguió todo. Se siguió preguntando. Y quedaron claras evidencias que llevaron a la presentación de la denuncia del ministro Sain, precisamente, porque alguien tenía que explicar”, expresó Perotti. “Si alguien había hecho un operativo” en el negocio de Oldani. “Había filmado donde había dinero ¿por qué después en el trámite de la causa no se hablaban de ese dinero y no estaba más?”, se preguntó el gobernador.

“Claramente son cosas muy groseras para mirar para otro lado. Eso no lo vamos a hacer. Estas son las cosas que todos tienen que empezar a saber, que los avances de las investigaciones los vamos a acompañar, plenamente. Es un mensaje muy concreto de respaldo a todos aquellos que actúan bien y por derecha. Y en el esquema de aquel que se desvía, deben tener claro que no habrá ningún tipo de respaldo, ni vista gorda, ni complacencia alguna. Ese es el camino”, planteó Perotti.

Rosario/12 ya informó que según la acusación del fiscal Rodríguez, la fiscal Ferraro permitió a la hija y al yerno de Oldani presenciar todo el procedimiento inmediato a la muerte y, luego, los autorizó a llevarse de la oficina el dinero y los elementos de valor que allí se encontraban. Incluso, avaló el pedido de ambos de que no se abriera una caja fuerte que estaba en el lugar. "A propósito, para establecer aproximadamente el dinero desaparecido contamos con un estudio realizado por la Policía Federal sobre imágenes, el cual concluye que la suma ascendería a 3.050.000 pesos y 1.100.000 dólares”, dijo Rodríguez. Una suma de dinero injustificada a la luz de la actividad general de la empresa de turismo que operaba Oldani.