San Lorenzo realizó este miércoles una nueva serie de hisopados, entre ellos a los hermanos Óscar y Ángel Romero, recientemente regresados al país, mientras que el delantero Alexander Díaz permanecerá aislado y bajo control médico por haber trabajado con Nicolás "Uvita" Fernández, quien dio positivo por coronavirus.
El Ciclón sometió también a las pruebas a Lucas Menossi, quien presentó un cuadro febril y desde el martes no participa de las prácticas, y a uno de los ayudantes de campo del entrenador Mariano Soso (dio positivo el lunes), Martín Wainer, que tuvo algunos síntomas compatibles con la enfermedad.
Por su parte, los Romero aguardan los resultados en una quinta de la ciudad bonaerense de Cañuelas mientras trabajan con las rutinas enviadas por el cuerpo técnico y con un preparador físico personal, Willhelm Guimaraes.
Tanto Óscar como Ángel se negaron a regresar en un principio porque rechazaron la obligación de cumplir con dos semanas de cuarentena, como establece el decreto del Gobierno nacional para cualquier persona que ingrese desde el extranjero, luego de pasar siete semanas de entrenamiento con el seleccionado paraguayo. A eso se les agregaron diferentes complicaciones administrativas, porque los Romero quisieron que el retorno sea con toda la familia y con su preparador Guimaraes, lo que complicó más el retorno.
De esta manera, ambos futbolistas se presentarán -de no mediar inconveniente- este jueves en la Ciudad Deportiva del Bajo Flores junto al resto de la delegación, que transita horas complicadas por diversos casos positivos de covid-19, y que ya dejó el predio de la AFA en Ezeiza, en el que practicó las últimas cinco semanas.
En el caso de Díaz, como el juvenil compartió la recuperación de su lesión con "Uvita" Fernández, cuyo positivo fue confirmado el martes por la tarde, el cuerpo médico decidió aislarlo por precaución ya se lo considera contacto estrecho. Díaz, de 20 años, fue operado de una fractura en el pie derecho a fines de junio, mientras que Fernández, ex Defensa y Justicia, se recupera de la rotura del ligamento cruzado de la rodilla izquierda que sufrió en febrero.
