La Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) autorizó de manera temporal y de “emergencia” un nuevo tratamiento contra la Covid-19 basado en anticuerpos sintéticos que podrá ser utilizado únicamente en enfermos leves o moderados. El gobierno de Donald Trump anunció la compra de 300.000 dosis de este fármaco.
El tratamiento fue desarrollado por la farmacéutica Eli Lilly y recibió la luz verde de la agencia de vigilancia sanitaria luego de analizar los resultados de un ensayo clínico realizado con 465 adultos no hospitalizados.
Sin embargo, los condicionamientos para el tratamiento llamado Bamlanivimab son muchos. Según se determinó, los anticuerpos se podrán utilizar únicamente con adultos y jóvenes de más de 12 años, con un peso de al menos 40 kilos y que tengan "un alto riesgo de evolucionar hacia un covid-19 grave y/o una hospitalización".
Consiste en la administración de una sola inyección intravenosa y el efecto que se espera es que esos anticuerpos imiten lo que hace el sistema inmunitario tras el contagio por el coronavirus: bloquear la punta del virus que le permite adherirse a las células humanas y penetrar en su interior.
Se considera que este tratamiento es más eficaz en la fase inicial de la infección, cuando los anticuerpos tienen todavía una posibilidad de detener el virus. Ocurre lo contrario durante la segunda fase del Covid-19, en la que el peligro ya no es el patógeno sino una reacción excesiva del sistema inmunitario, que ataca los pulmones y otros órganos.
En el ensayo clínico, sólo el 3 por ciento de los pacientes con alto riesgo de sufrir un Covid-19 grave tuvieron que ser hospitalizados o acudir a urgencias tras recibir Bamlanivimab, frente al 10 al que se le administró un placebo.
La compañía estadounidense había solicitado el visto bueno de la agencia reguladora hace poco más de un mes. Otros tratamientos, como el Remdesivir y la Dexametasona, recibieron autorizaciones tras haber demostrado cierta eficacia contra el patógeno, pero sus moléculas ya existían antes de la pandemia y tenían otros usos.