La Federación de Inquilinos le envió una carta al presidente Alberto Fernández en la que solicita la extensión del decreto que mantiene congelado el precio de los alquileres y prohibidos los despidos. El DNU que estableció estas medidas vence el 31 de enero. Había sido publicado a fines de marzo de 2020, con las medidas de aislamiento, y en septiembre fue prorrogado.

"Le pedimos al presidente, al Jefe de Gabinete y al ministro de desarrollo territorial y hábitat, que extiendan cuanto antes el decreto 320, tal y como nos fuera prometido por el Ministro de Hábitat en una reunión celebrada el 30 de noviembre pasado", dice la misiva, dirigida también a Santiago Cafiero y a Jorge Ferraresi. 

"La importancia de anunciar esta medida con prontitud está directamente relacionada con la angustia que padecen quienes no saben qué pasará con sus viviendas cuando, dentro de un mes, venza la vigencia del DNU", agrega el texto, que lleva la firma de Gervasio Muñoz, presidente de la Federación de Inquilinos. 

Por primera vez, el reclamo tiene el acompañamiento explícito de otras entidades. Firman la carta Juan Grabois (MTE), Pablo Moyano (Camioneros), Hugo Yasky (CTA), Daniel Yofra (Federación Aceitera), Nacho Levy (La Garganta Poderosa), Roberto Baradel (Suteba), Daniel Catalano (ATE), el CELS, entre otros.

Desde la entidad, aseguran que el 25 por ciento de los hogares argentinos alquila, y las familias destinan al menos el 50 por ciento del ingreso al pago de la renta. "Las consecuencias económicas de la pandemia provocaron la reducción drástica de nuestros ingresos, sin que los precios de la vivienda disminuyeran", dice el texto.

"Como del techo no se puede prescindir, la especulación y el abuso son moneda corriente", agrega. Pero, además, destaca que "el virus agravó el problema de manera exponencial", por la necesidad de realizar una cuarentena. Desde la Federación anticipan que de no prorrogarse el decreto se producirá una "catástrofe habitacional".