En Argentina, ya se aplicaron 52.195 dosis de la vacuna Sputnik V, de las 300.000 que llegaron en diciembre, informó la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti. La primera etapa de la vacunación está destinada a los trabajadores y trabajadoras de la salud, y comenzó el 29 de diciembre en todas las provincias del país. Este miércoles el Ministerio de Salud de la Nación, en conjunto con la Comisión Nacional de Seguridad en Vacunas comenzó la distribución de las 153.450 dosis que conforman la segunda tanda de vacunación en las 24 jurisdicciones del país. 

Mientras algunas provincias, como Santa Cruz y Córdoba, ya completaron la aplicación de la primera tanda de vacunas, otras lo harán en los próximos días, al tiempo que se distribuyen las dosis que completarán el total de las 300 mil que llegaron desde Rusia en diciembre. En todo el mundo, ya se administraron 14,21 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus. 

El primer reparto fue de 146.250 y estuvo destinado a profesionales de la salud, de entre 18 y 59 años, que trabajan en unidades de terapia intensiva y laboratorios de microbiología ubicados en aglomerados urbanos donde la pandemia tuvo mayor impacto y "hay más riesgo de una segunda ola", según afirmó Vizzotti. 

Los efectos adversos

El Registro Federal de Vacunación Nominalizado, que notifica los efectos adversos de las vacunas, indicó que fueron 1.088 los eventos registrados en relación a la vacuna Sputnik V. Los efectos se pudieron vincular a 39.599 dosis de la vacuna, aplicadas en 22 de las 24 jurisdicciones. En el reporte, la secretaria de Acceso a la Salud aclaró que se trata de "eventos leves, que se manifiestan entre las 6 y 8 horas luego de la vacunación, y duran menos de 24 horas".

Según el informe que registró los efectos adversos hasta el 4 de enero, 432 personas manifestaron fiebre con cefaléa -dolor de cabeza- y/o mialgia -dolor muscular-, mientras que otras 338 presentaron solamente estos últimos dos síntomas, y 111 indicaron tener únicamente fiebre. "Hay 7 eventos relacionados con ansiedad en la vacunación y 51 que se consideran errores programáticos, fundamentalmente personas mayores de 60 años que se han vacunado”, aclaró Vizzotti. Este conjunto de eventos -que el sistema de vigilancia de seguridad en vacunas denomina como "evento supuestamente atribuido a vacunas e inmunizaciones" (ESAVI)- está dentro de lo que el sistema considera de "vigilancia pasiva".

Las personas vacunadas que presenten alguno de estos síntomas deben consultar en el centro de salud más cercano, donde la institución debera reportar al Ministerio de Salud el caso como ESAVI y realizar una evaluación clínica. Cualquier integrante del equipo de salud puede reportar el caso, a través de la plataforma online del Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentina. Si el síntoma persiste después de las 24 horas, la persona deberá volver a consultar y se considerará el estudio del caso para constatar si se trata de un caso sospechoso de COVID-19, si cumpliera con la definición según los síntomas.

El aumento de casos

A pocos días del primer reparto de la vacuna contra el coronavirus, los especialistas y funcionarios del Ministerio demostraron preocupación por el aumento en la cantidad de contagios. "Es importante reconocer las situaciones en las que nos podemos contagiar”, señaló Omar Sued, presidente de la Sociedad Argentina de Infectología, quien participó del reporte del Ministerio y alertó sobre la baja percepción del riesgo de contagio en las personas jóvenes "que son un factor clave para transmitir la infección a los mayores de 60 años". 

Actualmente hay 3.460 personas internadas en unidades de terapia intensiva, lo que representa el 54% de ocupación en las camas disponibles en todo el país. En Río Negro y Neuquén, en cambio, la ocupación llega al 84 y 88%. Ante el crecimiento de casos registrados en los úlltimos días, Vizzotti llamó a reforzar los cuidados, prestar atención y "redoblar los esfuerzos".