Minutos antes que Tom Brady alcanzara, junto a su equipo los Tamba Bay Buccaneers, el SuperBowl del 2021, el pasado domingo las cámaras de televisión registraron un episodio que se suele repetir en las finales de los eventos deportivos más importante: el ingreso de un aficionado al campo de juego. Registrado por apenas un segundo, la trasmisión enfocó a un hombre que con una camiseta rosa cruzaba la línea de anotación del campo de juego. Luego se supo -las cadenas de televisión evitan reproducir imágenes de invasiones- que el intruso fue detenido por la seguridad del estadio sin tener contacto con los jugadores.
Lo que se conoció ahora es el trasfondo de ese salto al campo. Más allá de la notoriedad, Yuri Andrade también habría conseguido 350.000 dólares por saltar al campo. ¿Cómo? El hombre le contó a una cadena local que apostó dinero en las casas de apuestas a que el partido contaría con un "streaker", es decir, con un colado en el campo. La ganacia aparentemente ya será invertida: Andrade dijo que gastará los 350 mil dólares en "comprarse una jirafa".
Tras ser detenido, Andrade pasó una noche en la cárcel y al día siguiente salió en libertad bajo fianza de 500 dólares. De acuerdo a las crónicas locales, enfrentará una causa por invasión de un lugar con acceso prohibido para el público.
Por su parte, también llamó la atención que el "espontáneo" del Super Bowl llevaba puesto un traje de baño de una pieza de color rosa neón y con corte tanga y encima un calzón negro que logró bajarse mientas forcejeaba con la policía para mostrar las nalgas. Según medios estadounidenses, esa prenda es del dueño de una página web pornográfica, cuyo nombre estaba impreso en la parte delantera de la prenda, pero dijo que no recibió dinero por llevarla, aunque sí le pagaron la entrada a la final.
