desde Roma

Un nuevo zoom con familiares de desaparecidos en San Juan atribuidos al represor Carlos Luis Malatto se realizó este martes desde Italia donde el ex teniente coronel del RIM22, el Regimiento de Infantería de Montaña de la provincia cuyana, vive todavía en libertad pese a que la justicia italiana está investigando a fin de reunir pruebas para un juicio.

Se trata de la tercera video-conferencia hecha desde Italia, por la organización no gubernamental  de derechos humanos “24Marzo Onlus” para difundir en el mundo los hasta 30  casos de desaparecidos que se le atribuyen.

Malatto vive en Italia desde 2011 gracias a su pasaporte italiano.

Los dos zoom precedentes estuvieron dedicados a los casos de Florentino Arias, Daniel Russo, Alberto Carvajal, Armando Lerouc y Marta Saroff, cuya muerte o desaparición también es atribuida a Malatto. Esta vez, la videconferencia se ocupó de otros dos desaparecidos, ambos originarios de Buenos Aires, Juan Carlos Cámpora, que fue el primer rector de la Universidad Provincial Domingo Faustino Sarmiento de San Juan y secretario de la gobernación de esa provincia, y la modelo de origen francés Marie Anne Erize. Ambos fueron secuestrados en San Juan, ella el 15 de octubre de 1976, él el 25 de febrero de 1977.

Hasta el momento, según informó Arturo Salerni, uno de los abogados defensores de los familiares en Italia, es posible que las investigaciones preliminares (que según la justicia italiana deben hacerse antes para determinar si el sospechoso debe ser o no enviado a juicio) concluyan en en marzo. “Todos los abogados defensores trabajamos juntos y la embajada argentina en Roma ayuda mucho en la realización de todo este proceso”, comentó Salerni.

La fiscalía de San Juan ya escuchó a todos los testigos que a través de un exhorto le había pedido que hiciera la justicia italiana. Pero todavía no está fijada la audiencia preliminar. Se está todavía en el etapa sumarial.

Cuando se termine con el sumario de investigaciones sobre el sospechoso, pueden empezar las llamadas audiencias preliminares, entre septiembre y fin de año, y luego, si los jueces deciden, Malatto podría ser sometido a un juicio oral y público.

Del encuentro participaron  los familiares de los dos desaparecidos y el embajador argentino en Italia, Roberto Carlés y Horacio Pietragalla Corti, secretario de estado para los Derechos Humanos de Argentina. Un saludo y su solidaridad con los familiares la expresaron también José Luis Gioja, ex gobernador de San Juan y dirigente del Partido Justicialista, que también fue arrestado en el período de Malatto, y Norma Ríos, de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos de Argentina.

“Estos encuentros son un ejercicio de memoria --dijo Carlés - para recordar a las víctimas, los delitos de Malatto y también pensar cuáles son las estrategias posibles para obtener justicia y evitar la impunidad prolongada a lo largo de los años. Reitero el compromiso de la embajada. Vamos a hacer nuestros mayores esfuerzos para que se haga justicia. Es vergonzoso que después de tantos años, siga en libertad. Esperamos de Italia la mayor colaboración para poder realizar justicia”.

El Estado argentino, después de cuatro años de ausencia, está comprometido en llevar adelante estas causas que condenen a los acusados --dijo por su parte Pietragalla--. Sabemos que esos delitos no prescriben. Tenemos atrasos muy grandes en los juicios por delitos de lesa humanidad pero estamos llevando adelante un plan y una estrategia. La pandemia nos hizo una mala jugada porque no podemos avanzar como quisiéramos. Pero sería importante para la justicia argentina, italiana y mundial que estos casos --como el de Malatto--llegaran a una condena ejemplificadora”.

Otro tema del que se habló fue de un posible segundo pedido de extradición de Malatto a la Argentina. El primero fue rechazado por las autoridades italianas en 2014 e incluía en ese pedido, como motivaciones, los casos de los desaparecidos Erize, Cámpora , Jorge Bonil y Alberto Carbajal. Por lo cual, estos cuatro desaparecidos --por el hecho de haber ya sido rechazada la extradición motivada con ellos-- no podrían estar incluidos en el nuevo pedido de extradición ni Malatto ser juzgado por ellos en Argentina, explicó a PáginaI12 Jorge Ithurburu, presidente de “24MarzoOnlus”.

El encuentro contó además con el emotivo testimonio de los familiares: Marie Noelle y Yolanda Erize, las dos hermanas de Marie Anne Erize, y Pedro Sondereguer, nieto de Cámpora, que leyó una carta dirigida al encuentro por su madre, María Cristina Cámpora, que no pudo estar presente.

Yolanda Erize, la mayor de estas dos hermanas, contó que su familia de origen francés- siete hermanos - era “muy unida” y “católica”. Cantaban juntos. No amaban la violencia. Vivieron en Espartillar, cerca de Bahía Blanca, luego en Misiones y finalmente retornaron a Buenos Aires. Marie Anne empezó a ser modelo y a los 20 años fue a París, Inglaterra, Estados Unidos, donde conoció mucha gente del mundo del espectáculo. Pero además de los desfiles que hacía, le gustaba ir a algunas villas de Buenos Aires donde llevaba juguetes y ropa para los chicos. Una de esas villas era en Retiro, donde estaba el cura Carlos Mugica, que fue asesinado por la dictadura en 1974. En 1973, Yolanda y Marie Anne fueron juntas a Ezeiza a recibir al general Perón que llegaba a Argentina después de décadas de haber vivido en España, para presentarse como candidato en las elecciones presidenciales argentinas. “Era una época muy interesante. No he vivido ningun otro período así de apasionante en mi vida. Ojalá los jóvenes vuelvan a tener esos ideales de justicia social, de igualdad. Eramos muy inocentes, muy ingenuos, muy idealistas”, contó Yolanda Erize. Marie Anne conoció a Daniel Rabanal, un joven simpatizante de Montoneros, y se fue con él. Pero a él lo detuvieron el 6 de febrero de 1976 y a ella el 15 de octubre de 1976 en San Juan, donde había ido a vivir y enseñaba francés. Antes de que ocurriera esto, “mi madre la fue a buscar a San Juan. Pero ella le dijo que no estaba haciendo nada malo”, contó Yolanda.

Marie Noelle Erize tenía casi 15 años cuando su hermana desapareció, secuestrada en una bicicletería de San Juan donde estaba tratando de hacer arreglar su bicicleta. “Nuestros padres nos inculcaron valores muy importantes -contó Marie Noelle- . Yo la acompañé algunas veces a las villas, para repartir juguetes y ropa. Era increíble la facilidad que tenía Marie Anne para conjugar los dos mundos: las villas miseria y ser modelo. Aprovechó su perfil público en favor de la lucha social. Ella tenía pasaporte francés. Se podría haber ido de la Argentina pero no lo hizo”. También contó que la casa de su familia en Buenos Aires fue allanada por las fuerzas de seguridad el 21 de octubre de 1976. Ellos no sabían que Marie Anne ya había sido secuestrada. Revolvieron todo. Intentaron llevarse la platería que tenía la madre. Después supieron que su teléfono estaba intervenido, que el Side (servicios secretos argentinos) les abría la correspondencia y los seguía. “Fueron años de mucha impotencia. Yo me fui a vivir a Francia y en París, comencé una querella y proceso judicial por la desaparición de mi hermana”, contó Marie Noelle. “Esperamos poner entre rejas a Malatto, que nunca reconoció sus delitos”, agregó. “La Marquesita, el centro clandestino de detención de San Juan donde estuvo presa y fue torturada Marie Anne, es parte de la historia de nuestra familia. Porque nuestra hermana murió allí y todavía no sabemos donde están sus restos”, concluyó Marie Noelle recordando que, cuando su madre vino a Roma para declarar ante la fiscalía, fue recibida por el Papa Francisco y “eso fue un gran consuelo para ella”.

Pedro Sondereguer, el nieto de Cámpora, y diplomático argentino de carrera, al hablar se dijo emocionado porque a diferencia de Marie Anne Erize, el caso de su abuelo siempre pasó “muy desapercibido”, quedó casi olvidado. Cuando fue secuestrado en 1977, su hija (la madre de Pedro), María Cristina, tenía 22 años y quedó completamente huérfana porque su madre había muerto antes. “Yo agradezco todo el trabajo que se está haciendo ahora sobre Malatto. Es fundamental que la embajada, que el Estado acompañe todas estas luchas, no sólo por los familiares sino porque no vamos a sanar nunca como sociedad si no se busca justicia”, subrayó antes de leer la carta enviada por su madre.

“Mi padre fue una figura destacada de la política sanjuanina. Intelectual y científico brillante, Era un hombre que no soportaba las injusticias, las inequidades, los prejuicios, la intolerancia”, contó María Cristina en la carta. Hizo amistad con muchos jóvenes. “Cuando la dictadura desató sus hordas contra las casas de los que podían haber sido sus hijos o hijas, mi padre se puso de pie para recibir a esa juventud que corría en busca de ayuda. Les abrió su casa, su finca. Marie Erize estuvo un tiempo en un departamento de mi padre. Les dio trabajo, alimentos, protección. Les enseño a vivir y a defenderse. También logró sacar de la provincia a varios jóvenes a través de las montañas que él conocía bien. Fue un hombre solo, cumpliendo las mil y una funciones”, contó la hija de Cámpora que dijo además querer “rescatar” la memoria de su padre, “su nombre, su valentía, su honor”. “Cuando el horror se hizo presente en San Juan, me mandó una carta en la que hablaba de la posibilidad de su secuestro”, recordó. Esa carta la tiene hoy su nieto Pedro, que contó esto en la video conferencia, muy emocionado. El 25 de febrero de 1977, al dirigirse al consultorio de su médico en San Juan, Cámpora fue secuestrado.