El retiro de un administrativo de la TV Pública de alrededor de 4 millones de pesos en efectivo de una de las cuentas del canal, a lo largo de diferentes extracciones, puso a la emisora estatal en el centro de la escena. Si bien ese dinero se habría destinado al pago de gastos de producción de la serie Los amores prohibidos de Belgrano, la irregularidad está en que el sistema de medios públicos prohíbe realizar pagos en efectivo. La presidenta de Radio y Televisión Argentina (RTA), Rosario Lufrano, ordenó la realización de una auditoria integral para determinar qué fue lo que ocurrió, quiénes dieron la orden del retiro del dinero y cuál fue el destino de esa plata. La auditoria está a cargo de la Sindicatura General de la Nación (Sigen), por fuera de RTA. Por este hecho, un gerente y un director pusieron sus renuncias a disposición de Lufrano, quien no tomará ninguna resolución hasta tanto no finalice el informe de la auditoría, que se especula estará listo la semana próxima.

Según pudo saber Página/12, no hubo “bolsos” ni tampoco un único retiro de dinero. Lo que ocurrió es que el lunes se tomó conocimiento de distintas extracciones de dinero del Banco Itaú (la última realizada el viernes 5) por parte del tesorero del canal, que obró por orden del director y del gerente de administración financiera de la TV Pública. El pedido de dinero lo había elevado el gerente de producción, en principio para pagar en efectivo gastos de Los amores prohibidos de Belgrano, la serie de cuatro episodios que protagoniza Nicolás Cabré. Por este hecho, que viola los procedimientos de los medios públicos, pusieron sus renuncias a disposición -a pedido de Lufrano- el gerente de producción Ernesto “Cune” Molinero y el director de administración financiera Guillermo Siaria. También está siendo investigado Alejandro De Latorre, gerente de administración financiera, que por ser personal de planta para sancionarlo, suspenderlo o despedirlo tiene que haber una auditoría que lo determine.

La auditoría la está realizando el titular de la Unidad de Auditoría Interna, designado por la Sigen, en el marco de sus atribuciones como organismo de control interno y permanente. La investigación determinará la cadena de responsabilidades, si la plata retirada y los comprobantes que se presentaron están en orden, y si no hay facturas apócrifas o sobreprecios. Desde RTA esperan que el informe del auditor esté presentado la semana próxima, momento en que las autoridades tomarán alguna decisión sobre las personas investigadas. “El manejo transparente de los fondos es la guía principal de nuestra gestión”, afirmó Lufrano públicamente.