La increíble maniobra de la familia Macri con los parques eólicos transitó por un nuevo capítulo: ante el juez Marcelo Martínez de Giorgi, Mariano Macri se hizo el distraído y en apenas 15 minutos dijo que no sabe nada de nada de ese negocio de sus hermanos Mauricio y Gianfranco. 

En el libro de Santiago O’Donnell, Hermano, Mariano sostuvo que las groseras operaciones de los parques eólicos las hizo principalmente Mauricio, quien usó a Gianfranco Macri como testaferro. “A los demás hermanos nunca nos pasaron un papel, solamente informaciones muy escuetas, sin decirnos con quién se asociaban y cómo eran los contratos”. 

Ante el juez, Mariano no mencionó ni a Gianfranco como testaferro ni otras jugarretas de Mauricio: simplemente declaró que nunca le informaron nada. 

En un pase de manos, los Macri -durante el gobierno de Mauricio- se quedaron con 70 millones de dólares de ganancias en apenas 11 meses y además abrieron paso a sobreprecios en la energía que se le compró a esos paraques de molinos de viento. 

También está pendiente la declaración y el aporte de documentación de Mariana Nannis, la exesposa de Claudio Paul Caniggia, quien aseguró que el jugador de fútbol hizo fabulosos negocios con Macri en los parques eólicos. Nannis habló mucho en los medios, pero poco en la justicia.

Como se sabe, tras la publicación del libro de O’Donnell, Mariano Macri transita cierto arrepentimiento por sus dichos. Existe la sospecha de que terminó llegando a un arreglo con sus hermanos y su estrategia fue desmarcarse del libro iniciando una demanda contra el autor. 

Todo eso se reflejó en la declaración prestada en Comodoro Py, aunque se cuidó bastante de denostar a O’Donnell. “Con el autor tengo una larga relación de más de 35 años, pero puso en marcha la publicación sin que yo lo autorice -dijo Mariano Macri-. 

El hermano del expresidente anduvo por un camino de contradicciones: por un lado dijo que el periodista de Página/12 faltó a la verdad y por el otro admitió que fueron comentarios que él le hizo “de cosas que escuchaba pero que de ninguna manera son prueba de nada”. “No puedo declarar contra mis hermanos porque no sé nada. Desde antes de 2013 que no recibo información de la empresa, por lo cual no estoy en condiciones de aportar ninguna prueba”.

En verdad las contribuciones de Mariano Macri podrían tener peso en el expediente, pero hay cantidad de pruebas para sostener la acusación y no habrá ningún testimonio que por sí mismo sea definitorio. Las evidencias son inconstrastables.

Los hechos fueron los siguientes:

* Durante el gobierno de Cristina se pusieron en marcha licitaciones por los llamados parques eólicos, que son terrenos en los que se ponen molinos de viento. La energía que producen los molinos la compra el estado a un valor prefijado.

*La licitación fue ganada en 2009 por la española Isolux, tradicional socia de los Macri en muchos negocios.

* Isolux se quedó con cuatro parques, Loma Blanca I, II, III y IV, todos en Chubut.

* Incumplió con el desarrollo. Sólo puso en marcha Loma Blanca IV.

*Cuando asumió Macri se reafirmaron los contratos, pero en paralelo el grupo familiar constituyó una red de empresas que tenían una cabecera, Rainbow Finance en el paraíso fiscal de Luxemburgo. Casi toda la trama fue descubierta por la periodista de Perfil, Emilia Delfino. Hoy se sabe, por una investigación internacional de periodistas, en la que intervino La Nación, que quien manejaba Rainbow es Gianfranco Macri.

* La punta del iceberg salió a la luz con la revelación de que una de las empresas armadas por el Grupo Macri le prestó dos millones de dólares a Gianfranco a cuenta de ganancias. Lo reveló el periodista Gabriel Morini. Eso mostró quién estaba detrás.

* En 2016 el gobierno de Macri licitó más parques e Isolux se quedó con otros dos, Loma Blanca VI y Miramar, éste último en la Provincia de Buenos Aires. La adjudicación se produjo pese a que la empresa española estaba en quiebra, denunciada por corrupción en su país y había incumplido con las licitaciones de los otros parques eólicos.

*El Grupo Macri, a través de dos empresas, Sidsel y Sideli, con la terminal en Rainbow de Luxemburgo, le compró los parques a Isolux y once meses después los vendió. Se quedó con una ganancia de 70 millones de dólares en un simple pase de manos. Cinco parques se vendieron a una empresa china y el restante a Jorge Brito.

*Antes de eso dejaron todo listo para que el negocio fuera óptimo. Dado que la energía de los parques la compra el estado, el gobierno de Macri le adjudicó sobreprecios por megawatt a los parques eólicos del Grupo Macri. En las licitaciones el estado se comprometió a pagar 59 dólares el megawatt y Macri lo subió a 71 dólares.

* Este escándalo fue denunciado por los legisladores Rodolfo Tailhade y Martín Doñate, razón por la cual existe la causa judicial.

Tras una búsqueda que no fue sencilla, el juez logró ubicar el domicilio de Mariano Macri y lo convocó como testigo. Si se tiene en cuenta que ya se venía desdiciendo de lo publicado en Hermano, la lógica indicaba que también se iba a desdecir en lo referido a parques eólicos. 

Habrá que ver qué sucede en el núcleo familiar en los próximos tiempos: hay una fuerte pelea por la herencia de Franco Macri, el iniciador de toda la fortuna. Los choques pueden derivar en alguna declaración de interés. 

En los últimos meses apareció en escena Mariana Nannis en el marco de un divorcio turbulento y mediático. La mujer afirmó que tenía muchos documentos que demostrarían que Caniggia hizo negocios con Mauricio por miles de millones de dólares, una cifra que no se condice con la realidad, porque en parques eólicos se manejaron decenas de millones de dólares, no miles. 

Nannis fue citada a Comodoro Py el 1 de marzo, pero a última hora presentó un escrito diciendo que estaba en el exterior. El magistrado resolvió librar un exhorto a la justicia de Estados Unidos para que la exesposa del Pájaro entregue la documentación que dice tener. En algún momento, Nannis contó que entró a la computadora de Caniggia y se quedó con todo el contenido, incluyendo documentos sobre los parques eólicos. Habrá que ver qué es lo que revelan esos documentos y, principalmente, si es legal que la justicia los use en una causa.

En el negocio de los parques eólicos también participaron dos estrellas del fútbol argentino e internacional, Carlos Tévez y Guillermo Barros Schelloto. Ambos invirtieron dinero en el único parque eólico que realmente se puso a funcionar, Loma Blanca IV. Los fondos fueron aportados en blanco, con transferencias bancarias sobre Nueva York, lo cual podría evitarles dolores de cabeza. 

Distinta es la situación de los Macri, en especial Mauricio. Su gobierno le adjudicó parques a sus exsocios de Isolux de manera espuria, les fijo tarifas más altas que las establecidas en el contrato, compró los parques bajo cuerda con una sociedad domiciliada en Luxemburgo y revendió los parques sin hacer absolutamente nada. Eso sí, se quedó con la ganancia y con un ramillete de acusaciones penales: negociaciones incompatibles con la función pública, administración fraudulenta e incumplimiento de los deberes de funcionario público.