Defensa y Justicia cayó este miércoles por la noche como local ante Palmeiras de Brasil en la final de ida de la Recopa Sudamericana, que tendrá revancha el miércoles próximo en Brasilia, ya que allí hará de local el equipo paulista por disposiciones sanitarias ante la gravedad pandémica. Fue 2-1 para la visita, que maximizó las fallas locales y llega cómodo a la vuelta, aunque no cuenta la regla del gol de visitante.


Ante el último campeón de la Copa Libertadores, Defensa y Justicia probó una vez más que su tendencia a ser protagonista es mucho más que un estilo: se asemeja a un dogma. No importa el rival, ni el apellido que se siente en el banco, ni el resultado. El Halcón de Varela juega a hacerse de la pelota y atacar desde su primer hombre hasta el último, casi que a la inversa del famoso dicho que sentencia que "el delantero es el primer defensor". Y así, mientras se potencian las posibilidades de mejorar el espectáculo, también se acrecienta el margen de error.

Defensa se equivocó a los 16 minutos y Palmeiras, que llegó a conquistar el fútbol continental con una propuesta un tanto amarrete, con más de aprovechar los errores rivales que generar virtudes propias, se lo facturó. Walter Bou falló un cambio de frente y el equipo del portugués Abel Ferreira, tras un par de toques luego de recuperar en terreno propio, ya tenía a Rony cara a cara con el arquero Luis Unsain para definirle por arriba y poner el 1-0.

En desventaja Defensa intensificó su propuesta, con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva. Pero primero llegó lo positivo, con posibilidad de revancha para Bou a los 58. El exGimnasia y Boca metió un pase de crack para habilitar a Braian Romero, el gran goleador del Halcón en la conquista de la Sudamericana, quien definió con simpleza ante Wéverton. El local aprovechaba la floja tarea del medio brasileño, liderado por el veterano Felipe Melo, quien fue reemplazado poco después del empate.


Pero a los 75 llegó la mala. Adonis Frías cometió una infracción innecesaria aunque bastante lejos del área y el ingresado Gustavo Scarpa sacó un gran tiro libre de zurda que encontró una floja resistencia de Unsain. Nuevamente a correr de atrás para Defensa que, tras algún lógico quedo en sus energías, acorraló a los brasileños contra su área cerca del final. Y el equipo de Sebastián Beccacece festejó el 2-2 luego de una llegada de Bou por el fondo, pero el árbitro y el VAR anularon la conquista por la posición adelantada de Romero, aunque no tuvo contacto con la pelota. La imagen dejada por el Halcón fue positiva y, a pesar de la derrota, una gesta en Brasilia suena verosímil.