Bruno Covas, quien en 2018 y a sus 38 años se convirtió en el alcalde más joven de San Pablo, murió este domingo víctima de un cáncer que enfrentaba desde fines de 2019. El dirigente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) y nieto del histórico gobernador de San Pablo, Mario Covas, estaba de licencia del cargo desde el dos de mayo por el agravamiento de su enfermedad. "En estos últimos meses la vida me presentó enormes desafíos a los que he intentado enfrentar con la cabeza erguida", había declarado Covas al anunciar su pedido de licencia.

Covas nunca ocultó su enfermedad, que le detectaron hace dos años: en febrero anunció que un nódulo le apareció en el hígado y empezaba nuevas sesiones de quimioterapia. Había sido reelecto en los comicios de octubre de 2018 y en enero de 2019 asumió un segundo mandato de cuatro años, después de completar el mandato de Joao Doria, cuando éste se lanzó a buscar la gobernación.

En agosto de 2020 se contagió con covid-19 y, tras recuperarse, disputó los comicios municipales. Venció en la segunda vuelta, con casi el 60 por ciento de los votos, al izquierdista Guilherme Boulos.

Formado en derecho y con una imagen de administrador moderado en medio de la habitual polarización política de Brasil, Covas se hizo cargo de la ciudad más poblada de Brasil e hizo frente a la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, que ya dejó casi 29 mil muertos en la capital económica de América latina.