Los últimos números récord que arrojó la pandemia del coronavirus son para muchos análisis algo así como una tragedia anunciada, el escenario que se veía venir ante la falta de puesta en marcha de las restricciones fijadas por los DNU presidenciales. Moviéndose entre cerrar, abrir, y evaluar el costo político, algunas provincias fijaron medidas en sus distritos más afectados tras el segundo DNU, para luego volver atrás; otras, como Mendoza y Córdoba, aun con los números en rojo, nunca implementaron mayores cierres. La alarma encendida por el último reporte del Ministerio de Salud (que arañó los 40.000 contagios el miércoles) y la crítica ocupación de camas UTI modificó el rumbo en provincias en los que los casos siguieron en alza, que ayer establecieron finalmente restricciones. Fue parte de lo que se charló en la reunión por videoconferencia del miércoles a la tarde entre el presidente Alberto Fernández y doce gobernadores.
En la Ciudad de Buenos Aires, mientras tanto, la jugada electoral de un Horacio Rodríguez Larreta en desacato, embanderado en las clases presenciales, muestra su primera grieta: los funcionarios comienzan a hablar de la posibilidad de cortarlas o de hacerlas bimodales y durante la semana varias escuelas empezaron a recibir desde las supervisiones una "bajada" contapuesta a la que les impedía expresamente, hasta hace un par de días, el dictado de cualquier modalidad virtual. Un nuevo fallo judicial avala a padres y madres que piden virtualidad por motivos de cuidados, en un amparo presentado por familias del Mariano Acosta. Mientras aparece la idea de un cierre total los fines de semana, Larreta se sigue sacando fotos en escuelas y menciona, por primera vez, a los docentes como parte del asunto por "la dedicación, el esfuerzo y el compromiso que demuestran".
Tras el primer DNU, provincias como Santa Fe y Entre Ríos habían cortado la presencialidad en algunos departamentos, pero solo por una semana. Con una cantidad de contagios que supera a la de CABA (el miércoles fueron 3.086), ahora Santa Fe decidió volver a suspender las clases presenciales y sumó restricciones marcadas, desde el jueves y hasta el 30 de mayo. La más contundente, la prohibición total de circular en vehículos particulares, salvo por motivos de trabajo, advirtiendo que el control esta vez será estricto, según anunció el ministro de Trabajo provincial, Juan Manuel Pusineri.
Se suma a esta medida el pase a teletrabajo de la administración pública, y también de los sectores administrativos de empresas e industrias privadas. El cierre de shoppings, gimnasios y actividades deportivas, también al aire libre. La actividad gastronómica limitada entre las 6 y las 19, y el cierre de comercios a las 17. Anunciados como "nuevas medidas de convivencia", estos cambios rigen para todo el territorio provincial. En los departamentos más afectados de Rosario, La Capital y San Lorenzo, y en las localidades de Rafaela, Villa Minetti y María Teresa, se suspenden además las clases presenciales.
En Corrientes, donde el miércoles hubo un récord de contagios con 734 casos y 5 fallecidos, el gobernador Gustavo Valdés anunció que desde el jueves la provincia retrocerderá a Fase 3. Esto significa suspender la presencialidad hasta el 31 de mayo, y el pase a teletrabajo para la administración pública. "En una provincia que depende en alto grado del empleo público, esto puede tener un impacto importante en la circulación. Lo que tal vez se queda a mitad de camino es la restricción en la nocturnidad, de 0 a 7. Son medidas aplicables a 11 de los más de 70 municipios, pero que implican el 66% de la población de la provincia", evalúa el senador provincial Martín Barrionuevo, uno de los que por estos días clarifica los datos publicando diferentes análisis estadísticos y de incidencias en redes sociales. Lo que pide Barrionuevo, como tantos y tantas en todos los distritos, es mayor control de esas restricciones para que puedan surtir efecto.
En La Pampa comenzó a regir el miércoles la prohibición de reuniones y encuentros en espacios públicos, incluidas las plazas, con la aplicación de multas a los que incumplan la medida. Ya estaban suspendidas, desde la semana anterior, las clases presenciales y la actividad en gimnasios.
Neuquén es otra de las provincias oficialmente en alarma, con una situación crítica en los departamentos más poblados. Los casos diarios ascendieron de un promedio de 200 a mediados de abril, a más de 600 y el récord de 738 el miércoles. Ante este panorama la Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (ATEN) le pidió al Gobierno provincial la suspensión de la presencialidad escolar, por "la gran cantidad de burbujas escolares aisladas por contactos estrechos o casos positivos", explicaron. La capacidad de internación en esta provincia también alcanzó en las últimas horas "su límite máximo", según informaron autoridades del Ministerio de Salud provincial y del sector privado.
A principios de la semana la ministra de Salud, Carla Vizzotti, visitó las provincias de Neuquén y Río Negro y allí advirtió sobre un "alarmante crecimiento de casos". Reunida con la gobernadora Arabela Carreras recomendó implementar "acciones intensivas, focalizadas y transitorias con mucho cumplimiento en el cuidado, mientras se continúa trabajando en la vacunación y se monitorea permanentemente cada uno de los indicadores". La situación es allí especialmente preocupante en el Alto Valle (con ciudades muy pobladas y en un corredor con Neuquén), un único hospital zonal con terapia intensiva de alta complejidad en General Roca y las camas UTI saturadas. Las escuelas continúan abiertas y por el momento la provincia no ha sumado mayores restricciones.
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Con casos en aumento, Mendoza (1.145 contagios el miércoles) y Córdoba (3.910, casi mil más que CABA) son provincias que por estas horas están anunciando que "analizarán restricciones". En el caso de Córdoba, se descarta por el momento cualquier corte a la presencialidad escolar, y se estudian medidas para lo que se presenta como "la periescuela" (las actividades extraescolares).
La provincia suma cerca de 15 mil casos activos y 12 departamentos ubicados en Riesgo Alto, según establecen los cinco indicadores que fija el semáforo provincial. Los medios locales ponen el acento en que hay "aire de enojo" por las medidas en estudio en sectores como el de los dueños de bares, nucleados en la Cámara de Bares y Restaurantes de la Provincia de Córdoba. En esa provincia hoy se está pensando en empezar a limitar el funcionamiento de bares; no de restaurantes.
El gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, reiteró que no suspenderá las clases presenciales. La provincia continúa con las restricciones que estableció por decreto el 14 de mayo pasado: Circulación nocturna entre las 23.30 y las 5.30; suspensión de reuniones familiares. Y realización de compras y salida a restaurantes según el día que toque a la finalización del DNI. Para realizar la reserva previa, basta con que uno de los que vayan pueda hacer coincidir su documento.
