Sin la presencia del expresidente Mauricio Macri (que pretextó un compromiso previo), se reunieron las principales figuras de Juntos por el Cambio. El encuentro se produjo tras días de fuertes cruces por las candidaturas tanto en la Ciudad como en la provincia de Buenos Aires, más allá de las disputas que ya se habían desatado en Córdoba y Santa Fe. Tras las discusiones y los pases de factura en público, la cúpula de Juntos por el Cambio resolvió crear una "mesa de trabajo" que tendrá dos objetivos: por un lado, fijar las reglas para los partidos que integran Juntos por el Cambio ante el cierre de listas. La línea general es buscar listas de unidad y habilitar las PASO para dirimir candidaturas donde no se puedan conseguir. Por el otro, buscar ampliar la alianza opositora. La comisión se reunirá en dos semanas.

La reunión llegó después de que la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, cruzara en público a la ex gobernadora María Eugenia Vidal por no definir su candidatura y planteara que debería ser candidata en la provincia de Buenos Aires y no en la Ciudad. También luego de que el intendente de Vicente López, Jorge Macri, considerara que es "casi caprichoso" que el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, tenga la idea de postular a su vicejefe Diego Santilli en territorio bonaerense. A eso se le suman las internas que ya se están jugando en Santa Fe  y en Córdoba

El cónclave tuvo algunas reuniones previas para ir bajando los niveles de tensión. De una participó el lunes por la noche Vidal junto con Jorge Macri y el resto de la mesa bonaerense del PRO. Otra se llevó a cabo en el Centro Cultural Recoleta y fue un mano a mano entre Larreta y Bullrich. Fue el segundo encuentro en 7 días para hablar de las elecciones e intentar acercar posiciones, por ahora sin éxito. El planteo del jefe de Gobierno fue postergar la discusión de las candidaturas un mes. También consideró que el candidato o candidata en la Ciudad debería ser el que mejor mida en las encuestas. Bullrich rechazó esa posibilidad (según algunos sondeos, Vidal le saca como 15 puntos de imagen positiva). La presidenta del PRO le repitió lo que dijo en público: que si se presenta Vidal, es adelantar la interna de 2023. Y debería competir en la provincia de Buenos Aires o no competir. No hubo acuerdo y por estas horas crece la posibilidad de que macristas y larretistas vayan con listas separadas a enfrentarse en las PASO porteña. No obstante, todavía es posible que acuerden más cerca del cierre de listas.

De los distintos cruces en público no se habló en el encuentro. Ni tampoco se definieron candidaturas. "Esto no se resuelve en las reuniones ampliadas. Esto se resuelve entre Mauricio y Horacio. A lo sumo, también con María Eugenia", le indicó a este diario un dirigente conocedor del funcionamiento del PRO. En el Galpón Milagros en Palermo -mismo lugar donde fue la primera reunión presencial de Juntos por el Cambio, en abril de este año- estuvieron, además de Bullrich, Larreta y Vidal, el auditor Miguel Angel Pichetto, el senador Humberto Schiavoni y su par radical Luis Naidenoff; el titular de la UCR, Alfredo Cornejo; el titular del interbloque de Diputados, Mario Negri; el senador Martín Lousteau y los integrantes de la Coalición Cívica Maximiliano Ferraro y Juan López.

Quien no estuvo presente fue Macri. Como para distender el clima, hubo quien bromeó con que se acercaban las 19, hora en la que el expresidente dijo que se desconectaba para ver Netflix. En el encuentro, además de discutir sobre la situación en cada distrito decidieron que, para evitar que la sangre llegue al río, se va a crear una mesa de trabajo que se ocupe de definir las reglas de funcionamiento hacia el cierre de listas. Si bien faltaba formalizar los nombres, seguramente esa comisión la integrarán, por el PRO Vidal y Bullrich (una de cada ala), por la UCR Cornejo, por la Coalición Cívica Ferraro y Maricel Etchecoin y, por su lado, Pichetto.

No obstante, algunas de las reglas ya fueron conversadas: la primera es que buscarán que haya listas de unidad. Pero también se habló de habilitar la competencia en las PASO donde no se pueda llegar a un acuerdo entre los distintos sectores (nadie lo dijo, pero donde más problemas tienen es dentro del PRO). Y se planteó que las PASO "sean ordenadas y civilizadas".

Además, insistieron en mejorar y homogeneizar la estrategia de comunicación (sobre los aumentos salariales en el Congreso, por ejemplo, mientras algunos los avalaban, otros los criticaron o anunciaron que iban a donar su sueldo, lo que generó un fuerte ruido en los bloques legislativos) y también en ampliar la coalición a otros partidos afines. Lousteau fue muy insistente con esto. El senador advirtió que, para ganar, la alianza debe ser lo más amplia posible en cada provincia. "Tenemos que mostrarle a la gente un rumbo económico posible y para eso hay que hacer autocrítica de la propia gestión", remarcó. No estaba Macri para hacer muecas.

Tras el encuentro, Negri planteó: "La de hoy fue una buena reunión de trabajo, en la que hicimos un diagnóstico de cómo estamos parados en todas las provincias. La conclusión central es fortalecer la unidad y tratar de ampliar la coalición para ganar las elecciones y proponer una alternativa de poder a los argentinos". El titular del interbloque de Juntos por el Cambio remarcó que "la elección de 2021 es clave para la democracia argentina porque el kirchnerismo tiene hoy como único dique de contención la Cámara de Diputados. No podemos permitir que se hagan del control total del Congreso".

El mismo argumento usa en otras mesas de discusión Bullrich para pedirle a Larreta que no insista con Vidal como candidata porteña (Vidal, por su parte, no definirá nada hasta que regrese de la gira que inicia por Estados Unidos). El jefe de Gobierno, no obstante, considera que el perfil de la ex gobernadora es mucho mejor que el de la presidenta del PRO y le garantiza más bancas en Diputados y más lugares en la Legislatura porteña. La discusión se zanjará en las próximas reuniones o se dirimirá con los votos.