Un estudio realizado en Sudáfrica sobre la vacuna desarrollada por Johnson & Johnson demostró que ese fármaco dio una alta respuesta positiva contra las variantes Delta y Beta de la covid-19. Los resultados indicaron que la respuesta inmune sigue siendo buena al menos hasta ocho meses después de su aplicación.
Inicialmente, el análisis se había hecho para comprobar el grado de efectividad sobre la variante sudafricana (Beta), pero el avance posterior de la investigación dio resultados positivos también para la originada en la India, que hasta ahora es la más agresiva que se haya conocido.
Los datos recopilados por el Consejo de Investigación Médica de Sudáfrica (SAMRC, su sigla en inglés) indicó que la fórmula desarrollada por la farmacéutica Janssen "funciona mejor" contra la variante Delta que contra la sudafricana.
Esta noticia es particularmente esperanzadora dado el rápido avance de la variante Delta en África, donde el acceso a vacunas sigue siendo muy escaso; sólo el 2,66 por ciento de la población recibió alguna dosis.
La variante india, que tiene un altísimo grado de contagiosidad y que, debido a ello, aumenta las cantidad de casos en consonancia con la de fallecimientos, está presente ya en 13 naciones africanas y su expansión está disparando los contagios en la presente tercera gran ola de covid-19 a nivel continental.
La presidenta SAMRC, Glenda Gray, indicó que los estudios realizados en el país demuestran una "duración sorprendente" de la respuesta inmune de la fórmula monodosis, aunque hay que seguir monitoreando su evolución ya que hasta ahora tienen datos de un periodo de ocho meses.
"En conclusión, la vacuna J&J funciona bien en Sudáfrica con la difícil variante Beta que tenemos. Todos los datos que hemos visto revelan una buena respuesta inmediata y sostenida contra la variante Delta y vemos una duración sorprendente” de la respuesta inmune para una sola dosis, señaló.
Estos datos vienen avalados tanto por estudios de laboratorio como por el bajo número de infecciones graves detectadas entre los trabajadores sanitarios sudafricanos. A ellos se les administró la monodosis de J&J como parte de un gran estudio de aplicación iniciado por SAMRC a mediados de febrero pasado.
Del casi medio millón de personas inmunizadas bajo esa iniciativa, solo un 1 por ciento se infectó, y del total de esos contagios el 98 supuso enfermedades "suaves". En tanto, el 4 por ciento de los infectados tuvo síntomas moderados y solo el 2 desarrolló un cuadro grave.
En Sudáfrica, gran epicentro de la covid-19 del continente con casi 2 millones de contagios acumulados, la variante Delta está desplazando incluso a la variante Beta, que a su vez había borrado prácticamente la presencia de las versiones previas del coronavirus.