El programa Billetera Santa Fe cumplió seis meses, y su irrupción en la economía activó expectativas inusitadas en el contexto de la pandemia, al punto de que ahora otros rubros hacen cola para pedir ser incorporados al menú de prestaciones de esta plataforma de pago con reintegro del 30%. Hasta las inmobiliarias propusieron al Gobierno provincial la posibilidad de que los inquilinos usen esta herramienta para abonar los gastos iniciales de un contrato de alquiler. Un indicio del impacto de esta medida estímulo al consumo que cuenta con 650 mil usuarios, y 13.000 comercios adheridos en la provincia que en este medio año facturaron 11.200 millones de pesos de este modo.
El Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario hizo la propuesta formal ante la Secretaría de Comercio Interior, para implementar esta billetera virtual que impulsa el Estado santafesino como medio de pago en los trámites de inicio de cada contrato de locación. De esta manera, a cada inmobiliaria le facilitaría ofrecer estos importes (mes de depósito, honorarios, comisiones, sellados, gastos, etc) en cuotas y con la posibilidad de reintegro para el inquilino.
Los corredores hacen cálculos sobre el impacto de la Billetera Santa Fe (BSF) en unos 45 mil contratos de alquiler que se renuevan cada año. "Es una suma muy significativa; y para el locatario será un alivio muy grande si cuenta con el reintegro de 30% o de hasta 5.000 pesos", valoró Andrés Gariboldi, titular de la Cámara.
El secretario de Comercio, Juan Marcos Aviano, reveló la propuesta de las inmobiliarias y le dio curso. Dijo que la implementación está bajo análisis, aunque aclaró que no se aplicaría para el pago del alquiler mensual.
En rigor, Aviano aseguró que hay más rubros de la economía doméstica que quieren incorporar la BSF a sus medios de cobro. Construcción, taxis y remises, oficios y profesiones liberales, peluquerías, gimnasios, ópticas, son algunos pedidos presentados en el mismo sentido. "Hay un boom de adhesiones, a razón de 150 comercios diarios que se dan de alta", contó el funcionario acerca de la expansión de la herramienta en la población de 270 localidades donde está presente.
De esta manera, entendió que "se está logrando un piso de mercado que da un potencial enorme para que la provincia haga despegar la actividad en pandemia".
Aviano admitió, no obstante, que el objetivo es generalizar el uso de la BSF no solo en sectores medios, como ocurre hasta ahora, sino también en familias de menor poder adquisitivo y donde la bancarización no es moneda corriente. "Queremos focalizar más en el comercio chico y barrial, porque si queremos fomentar el consumo tenemos que ser transversales", dijo.
Según observan, a medida que la aplicación se extiende en supermercados y comercios de consumo diario los usuarios tienden de a poco a usar menos la tarjeta de débito y a pagar a través de la BSF. "Las billeteras virtuales son un cambio cultural y deben hacernos la vida más fácil. Ojo que no es cosa de jóvenes: el promedio de edad de los usuarios es de 48 años", señaló.