En una “acción relámpago” encabezada por Hebe de Bonafini, un grupo de madres de Plaza de Mayo hizo una sentada frente a la sede de la Conferencia Episcopal Argentina para rechazar el llamado a la “reconciliación” que la cúpula de la Iglesia Católica impulsa entre víctimas y victimarios del terrorismo de Estado durante la última dictadura cívico-militar. La titular del organismo cuestionó, además, a los ministros de la Corte Suprema que ayer beneficiaron con el 2x1 a los represores condenados por delitos de lesa humanidad. "Esos jueces no van a pasar a la historia, nuestros hijos sí. sentenció. 

Las siete integrantes de la Asociación Madres de Plaza de Mayo llegaron esta mañana al edificio ubicado en Suipacha 1032, de la ciudad de Buenos Aires y colgaron sobre las rejas una bandera con la inscripción “Ni olvido ni perdón ni reconciliación, 1000 años de prisión” para los genocidas. Permanecieron allí hasta el mediodía recibiendo el apoyo de varias personas. “La batalla callejera es la que te salva”, Bonafini.

“Estamos aquí en silencio pero con un reclamo muy duro”, subrayó la dirigente al tiempo que ratificó el rechazo de la convocatoria que hicieron los obispos en el marco de la asamblea plenaria que mantienen en su casa de retiros de la localidad bonaerense de Pilar. “Cuántos judas hay acá, por qué tenemos que perdonarlos nosotros”, cuestionó la titular del organismo durante una entrevista por AM 750, en la que recordó que “la iglesia es una gran responsable” de lo que ocurrió durante la dictadura.

Además, durante una entrevista por radio Del Plata, Bonafini cargó la responsabilidad de ese llamado a la "reconciliación" sobre los obispos argentinos y relativizó la posibilidad de que detrás de esa convocatoria estuviera el papa Francisco. “Que esté al tanto del tema, sí. Que lo haya impulsado, no”, sostuvo Hebe, al tiempo que no descartó la posibilidad de que intente comunicarse con el Vaticano para hablar sobre el tema con el propio Jorge Bergoglio.

La sentada frente al Episcopado fue decidida ayer, luego de que se conociera el fallo de la Corte Suprema, que con la aplicación de la derogada ley del 2x1 benefició a un represor condenado por delitos de lesa humanidad, abriéndole la puerta así a casos similares que pidan la reducción del cumplimiento efectivo de las penas.

Sobre ese tema, el organismo dará a conocer su posición durante una conferencia de prensa anunciada para las 16 de hoy en Plaza de Mayo, encabezada por el constitucionalista Eduardo Barcesat, el ex juez federal Carlos Rozanski y Bonafini.

No obstante, la dirigente rechazó el fallo y apuntó contra Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, los dos jueces propuestos al máximo tribunal por el gobierno de Mauricio Macri y quienes fallaron a favor de la morigeración del cumplimiento de las penas a los genocidas. “Los pusieron para eso, es gente paga”, dijo Bonafini.

También criticó a Ricardo Lorenzetti, a pesar de que falló en contra del 2x1. Según la dirigente, el titular de la Corte “se puso en ese lugar porque se está probando el traje de presidente” de la Nación. “Lo que tengo claro -concluyó- es que ellos no van a pasar a la historia, nuestros hijos sí. Lo que se jugaron la camiseta, sí.”