El costo de la canasta básica total (CBT), que mide la línea de pobreza, subió 1,6 por ciento en julio, según informó el Indec este miércoles. La cifra se ubicó por debajo de la inflación minorista del mes y representó la menor suba desde julio del año pasado. El centro de estadística oficial detalló que la familia "tipo" (de dos adultos y dos niños) necesitó 67.577 pesos para no ser considerada pobre.

En tanto, la canasta básica alimentaria (CBA), que solo contempla alimentos indispensables para un adulto equivalente y mide la línea de indigencia, ascendió 2,1 por ciento. De esta manera, una familia necesitó 29.003 pesos para no ser considerada indigente.

En lo que va del año la inflación general alcanzó el 29,1 por ciento y se ubicó por encima de las variaciones de la CBT (+24,7 por ciento) y la CBA (+27,9 por ciento).

En términos interanuales, el IPC trepó 51,8 por ciento, mismo salto que el de la CBT pero inferior al de la CBA (+58,3 por ciento).

Los aumentos en julio se desaceleraron respecto de meses previos, aunque que el salario mínimo vital y móvil actualmente es de 28.080 pesos. Por este motivo no llega a cubrir la canasta básica alimentaria, mientras que la suma de dos salarios tampoco llega a cubrir la canasta total.

La semana pasada el Indec informó que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) creció 3 por ciento en julio. El mayor aumento se verificó en la división restaurantes y hoteles, con un 4,8 por ciento, y fue seguido por salud, con el 3,8 por ciento.

Alimentos y Bebidas mostró aumentó del 3,4 por ciento mensual pero se registró una desaceleración en los precios de carnes y derivados, y pan y cereales.