Por la Terminal de Ómnibus de la ciudad de Catamarca transita un promedio de 12 mil personas por día. Si bien durante el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) permaneció la mayor parte del tiempo cerrada, con la vuelta a las actividades se reavivó el tránsito pero también los robos y arrebatos. Por esta razón colocarán cámaras de seguridad.

Gustavo Quintero, director de la Terminal, confirmó a Catamarca/12 el crecimiento de la inseguridad dentro del edificio y sobre todo en los alrededores. “La necesidad de colocar cámaras de seguridad se evaluó a principios del 2020. En ese momento, el Ministerio de Infraestructura y Obras Civiles del cual dependemos realizó un relevamiento para saber cuántas necesitábamos, que son 29, pero comenzó la pandemia y todo se postergó”, contó.

En el edificio, la única zona que tienen cámaras de seguridad es la playa de estacionamiento. En el interior, donde estan los comercios y el patio de comidas no hay. La única cámara que enfoca las dársenas de la Terminal pertenece a la policía de la provincia y está sobre un domo ubicado en calle Vicario Segura. Quinteros, admitió que esto es insuficiente, no sólo porque la cámara no alcanza a filmar el sector exterior completo, sino porque muchos de los robos se cometen en el sector de los taxis o por fuera.

“Si bien hay una cabina de policía en el edificio y nosotros tenemos personal de seguridad, que pertenece a la Terminal, las 24 horas del día los robos igual suceden”, señaló el funcionario. En este sentido se refirió a que la zona donde está ubicada “es insegura” y que Catamarca no está exenta de que se cometan este tipo de delitos como sucede en la mayoría de las terminales de ómnibus del país.

“Es muchísima la gente que circula por día. El promedio es de 12 mil personas y la mayoría viene por los colectivos urbanos que también hacen base acá. Con la vuelta del cine el flujo de gente subió. Entendemos que éste tipo de lugares son los preferidos por los delincuentes”, dijo. El promedio es de 4 robos por semana, pero “la mayoría se comete los alredores, donde roban valijas, teléfonos celulares o billeteras a los pasajeros”, contó Quinteros.

Es por esto, que se volvió a solicitar al Ministerio que compren y coloquen estos aparatos, con los que esperan que la cantidad delitos disminuya. “Estuve hablando la semana pasada y me dijeron que dentro de uno o dos meses ya estarán todas colocadas”, concluyó.

Edificio

El edificio de la Terminal de Ómnibus pasó a manos del Estado provincial en 2015. Desde entonces, tiene un Director que depende del Ministerio de Infraestructura y Obras civiles, y que es el que administra. A su vez, cuenta con 43 empleados que funcionan como Unidad Ejecutora y están bajo el convenio de los empleados de comercio y se auto- sustenta con el cobro de alquileres de los locales comerciales, la playa de estacionamiento, el patio de comidas y lo que se denomina “toque de dársena”, que lo pagan las empresas de transporte urbano, interubanos y nacionales y que equivale al precio de un boleto de pasajeros.

El objetivo del Estado provincial, según confirmó Quinteros, es que la Terminal de Catamarca se convierta en una Sociedad Anónima con Participación Estatal Mayoritaria (Sapem), tal como sucedió con la empresa de energía eléctrica y de la de aguas entre otras.