Hace unos días la consultora Politikon Chaco publicó un informe de una investigación realizada en 17 provincias, en la que resaltaba que en lo que va del año (enero a septiembre) Salta aumentó sus ingresos en cuanto a recaudación un 77,2% más que en el mismo período de 2020, ubicándose quinta entre las que mayores ingresos obtuvo en ese rubro e incluso superando los números de 2019 prepandemia.

Además, si se descuenta la inflación, que también genera un volumen mayor de recaudación, el crecimiento fue del 47%. Solo por debajo de distritos como Tierra del Fuego, que obtuvo una mejoría del 84,5%; Misiones, con el 95,1%; Formosa, el 97,8%, y Jujuy, que dobló lo recaudado en 2020 llegando al 106,3%.

Ese aumento va de la mano de un crecimiento en todas las regiones del país, ya que el informe destaca que se recaudaron casi $1.107 millones, lo que equivale un incremento en los ingresos provinciales del 71,6% en los 17 distritos estudiados.

“El principal componente de este crecimiento tuvo que ver con la firma del Consenso Fiscal donde se liberó el tope de alícuotas para las entidades financieras”, dijo a Salta/12 el secretario de Ingresos Públicos, Diego Dorigato. En ese momento la provincia pasó a cobrar en ese ítem un 8%, cuando el tope no le dejaba superar el 5,5% en el caso de los servicios financieros y 7% para las actividades financieras.

Las entidades financieras en su conjunto representan casi el 30% de lo que recauda Salta. Para Dorigato, otra de las explicaciones viene de la mano del crecimiento que se vio durante este período debido, entre otras cosas, a la retracción del último año por el efecto de la pandemia y las restricciones para circular, a lo que sumó la inflación, que genera mayores volúmenes de dinero.

“Lo que pasó el año pasado debe haber generado una contención de demanda que empezó a traccionar en este”, agregó. A la vez que indicó que detectaron un crecimiento de las bases imponibles “bastante importante” y que superan incluso los valores de inflación, que la explicó también por un fenómeno de demanda contenida por la pandemia de coronavirus. Y sumó el crecimiento de la obra pública, “que siempre mejora la recaudación a través de los contratistas”.

El funcionario aceptó que también influyó el mejoramiento en la recaudación la medida adoptada el último año del monotributo unificado con AFIP, aunque aclaró que es un universo de contribuyentes chico. “Más que un aumento de recaudación, es una medida de simplificación para el contribuyente y para nosotros en cuanto al procesamiento de toda esa información”, explicó. Y acotó que este sistema les libera agentes para poder controlar a los grandes contribuyentes “que es donde está el grueso de la recaudación”.

Aseveró que ese impacto derrama obligadamente en todo el territorio debido en primer término a que la Ley de Coparticipación así lo establece, “si recaudamos 10, debemos repartir el porcentaje que corresponde por ese monto, y si recaudamos 12, sigue siendo el mismo porcentaje, no es que se la guarde distinto”.

También relató que ese crecimiento se verá reflejado en el presupuesto 2022, pero que aún no lo presentan “porque falta cerrar el Consenso Fiscal de este año, que suspendía la reducción de alícuotas, por lo que si no lo firmamos vamos a tener que volver al esquema anterior y eso impacta fuertemente”. Y subrayó que el ministro, junto al gobernador se están juntando con los intendentes para priorizar las obras que cada municipio necesita “y hacer un presupuesto federal y equilibrado”.

Pero destacó que prefieren ser cautos a la hora de celebrar el incremento, bajo el argumento de que tanto la recaudación como el gasto “son muy volátiles” y están atados a factores externos, ya que la misma inflación, que genera mayores ingresos, también genera egresos. Y mencionó entre ellos las últimas negociaciones paritarias “fuera de cronograma y que no estaban presupuestadas, pero que esta mejora en la recaudación nos ayudó a destrabarla”.

A su vez, recordó que la provincia tiene deuda en dólares “y tenemos que estar cruzando los dedos para que el dólar no se dispare para poder cumplir con los pagos”. “No es que sobre plata”, manifestó. Aunque sí aceptó que genera alivio para cerrar el año con balance positivo en las cuentas fiscales así como sucedió en 2020, que rondaron los $15 millones de superávit sobre un presupuesto de $150.000 millones. “Este año también venimos bien y creemos que lo vamos a cerrar con un superávit parecido al del año pasado”, mencionó, y añadió que esa es la principal preocupación del Ministerio de Economía.

Con respecto a sus expectativas a futuro, si bien reconoció el crecimiento de la economía que hubo en los últimos meses, consideró que seguirá “pero mucho más suave”, acercándose a los valores de inflación. Por lo que ese efecto rebote producto de la demanda contenida durante la pandemia, y que se prolonga al último tramo de 2018 y todo 2019 como consecuencia de la recesión que impuso la política económica de Mauricio Macri, comenzará a amesetarse, “de hecho así lo demuestran las bases imponibles de los últimos dos meses, en donde la curva de crecimiento comienza a desacelerarse”.

Aunque aclaró, que como todos los años, volverá a crecer los primeros meses del año que viene por el movimiento en el gasto por las fiestas y las vacaciones.

A nivel nacional, el último dato es de septiembre, cuando el Ministerio de Economía informó que la recaudación tributaria creció en agosto 64,2% respecto a igual mes de 2020. Desde esa cartera pusieron énfasis en que la mejora se explicó por la recuperación de la economía, el impulso de los tributos del comercio exterior, la aceleración del crecimiento de los recursos de la seguridad social y, en parte, por la baja base de comparación por la pandemia.

Los municipios, sin mejoras

A la inversa de lo que sucede en el ámbito provincial, Diego Dorigato lamentó que pocos municipios están implementando mecanismos para mejorar su recaudación, “les cuesta mucho y no aprovechan todas las ofertas que les ofrecemos”, contó.

Hasta el momento, solo La Caldera se acogió a la medida del monotributo unificado, y cuatro o cinco más estaban en ese camino. “Les hicimos también la Ley del automotor”, para que el ítem sea el mismo que se cobra en todo el territorio nacional, “les ofrecimos trabajar con algún sistema centralizado de gestión de cobro del impuesto automotor, pero ahí van todavía”, sostuvo el funcionario provincial.