La activista Greta Thunberg encabezó este lunes una manifestación pacífica de ecologistas en Glasgow y dijo que los líderes mundiales reunidos en esa ciudad del Reino Unido por la Cumbre del Clima de la ONU no están tomando "lo suficientemente en serio" el problema del calentamiento global. En el primer día de la COP26, Thunberg se dirigió a decenas de manifestantes congregados en un parque de Glasgow, la más grande de las ciudades escocesas, donde arengó a los asistentes con un discurso interrumpido por frecuentes cánticos. 

La agenda de la joven sueca incluyó un encuentro con la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon. A Thunberg la recibieron como a una estrella de rock el domingo en su llegada a Glasgow, con cientos de periodistas y manifestantes expectantes por la figura de la ambientalista y su fuerte discurso contra el cambio climático, que la llevó a enfrentarse a líderes como el expresidente estadounidense Donald Trump.

Apoyada por el grupo ambientalista juvenil Fridays for Future, el organizador del encuentro, Thunberg dijo que no confiaba en los políticos reunidos en la cumbre. "Dentro de la COP sólo hay políticos y personas en el poder que fingen tomarse en serio nuestro futuro, que fingen tomarse en serio la presencia de las personas que ya se están viendo afectadas por la crisis climática. El cambio no va a venir de ahí dentro. Eso no es liderazgo. Esto es liderazgo", aseguró señalando a los manifestantes y rematando con su ya clásico grito dirigido a los líderes mundiales: "No más bla, bla, bla".

Mientras tanto más de un millón de personas firmaron una carta abierta de la activista sueca difundida este lunes, en la que exige a los líderes que "afronten la emergencia climática". En la misiva se exponen exigencias que deben cumplir los gobiernos para hacer frente al cambio climático, entre ellas mantener el objetivo de impedir que la temperatura global aumente más de 1,5 grados centígrados este siglo respecto de los niveles preindustriales. "Como ciudadanos de todo el planeta, les pedimos urgentemente que aborden la emergencia climática. No el año que viene. No el mes que viene. Ahora", destacan activista como Thunberg, Dominika Lasota y Mitzi Tan. 

Más temprano, Thunberg se reunió con la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, quien destacó su lucha. "Las voces de jóvenes activistas ambientales como ⁦Greta Thunberg y Vanessa Nakate⁩ deben ser oídas fuerte y claramente en la COP26. Los próximos días no deben ser cómodos para los líderes, deben sentir la responsabilidad de actuar", tuiteó Sturgeon sobre su encuentro.

Grupos de activistas planean ruidosas manifestaciones durante la cumbre climática de la ONU, en especial en los próximos días. Uno de los más organizados, Extinction Rebellion, pareció dejar entrever su disposición a provocar disturbios como manera de llamar la atención de los líderes mundiales, y medios locales como Glasgow Times dijeron que la policía no descarta cientos de detenciones diarias si ese llegara a ser el caso.

Si bien la agrupación ecologista no adelantó cómo o dónde protestará, confirmó que utilizará la "acción directa no violenta". Para garantizar la seguridad, el gobierno británico desplegó más de diez mil agentes especialmente capacitados equipados con dispositivos de alta tecnología.

En tanto, la organización ecologista Greenpeace logró este lunes la autorización de las autoridades escocesas para poder navegar con su barco Rainbow Warrior por el río Clyde, que pasa por Glasgow. Greenpeace reiteró su determinación a llegar con el barco hasta la ciudad, pese a que las autoridades le han prohibido ingresar al puerto.

Para completar el caos de la ciudad, entre autopistas y calles cortadas por la seguridad que provocó la llegada los líderes mundiales a la cumbre climática, cientos de trabajadores del servicio de recolección de basura declararon una huelga exigiendo mejores salarios. Un total de 1.500 empleados paralizaron sus tareas dejando los contenedores sin vaciar y las calles llenas de basura.