El consumo en la provincia de Santa Fe continúa su recuperación respecto del año pasado, y marca un horizonte de mayor actividad económica luego de las restricciones a las que obligaron las dos olas de coronavirus. Lo afirma un relevamiento del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso), en base al relevamiento de diversos rubros como supermercados, ventas de cemento y consumo eléctrico, aunque con algún retroceso en el patentamiento de autos.

El informe presentado esta semana señala que en el mes de setiembre, la variación interanual de las ventas en supermercados fue 4,5% mayor respecto de 2020, y allí radica el indicador más determinante del amperímetro del consumo. 

A la cabeza de los sectores, "Indumentaria, calzado y textiles para el hogar" duplicó su performance. Los consumidores santafesinos gastaron en este ramo 97,3% más que en setiembre de 2020. Y la comida también experimentó una suba similar. El consumo de "Alimentos preparados y rotisería" mostró un aumento interanual del 90,1%. En cuanto a bebidas, el repunte fue del 76% interanual en setiembre.

La demanda de energía eléctrica siguió en alza y representa un buen indicador. Los usuarios no residenciales de más de 300 kw consumieron 12,5% más interanual, franja que contempla comercios y algunas pymes. Los grandes usuarios (industrias y grandes comercios) aumentaron su demanda eléctrica en 6 puntos, y los clientes residenciales también mejoraron 2,5% su consumo.

En cuanto al cemento –el termómetro de la construcción–, cayó el consumo interanual por bolsa (-10,6), lo que indica que aflojaron las obras particulares y menores típicas de la pandemia, pero aumentó 16 puntos el consumo de cemento a granel, propio de las grandes obras.

El patentamiento de vehículos mostró una cara doble: en octubre se vendieron 4474 motos 0 km, 27% más que en el mismo mes de 2020, y 55% más que en 2019. Pero en autos no. Se patentaron en octubre 2798 unidades, 9% menos que en setiembre, y 27,7% menos que en ese mes de 2019.