Alemania ampliará a nivel nacional las restricciones para las personas no inmunizadas e impondrá la vacunación anticovid obligatoria, confirmó la canciller saliente Angela Merkel, tras su reunión con su sucesor, Olaf Scholz, y los líderes regionales. El país superó por segunda vez los 70 mil casos de coronavirus en un día y, si bien la situación mejoró algo en las últimas jornadas, las autoridades creen que todavía es alarmante, con numerosos hospitales colapsados y otros cerca de la saturación.
Las principales medidas
En concreto, aquellos que no hayan sido inoculados no podrán reunirse con personas fuera de su núcleo familiar. Además tendrán vetado el acceso a comercios no esenciales, restaurantes y lugares de culto y de ocio, informó Merkel, quien busca de esta forma contener la cuarta ola de covid-19 y frenar un eventual avance de la variante Ómicron.
Las autoridades acordaron que sea obligatorio el uso de tapabocas para los niños en todas las escuelas, una medida que no estaba vigente hasta ahora en todo el país. También se confirmó que en los próximos días se presentará ante el Parlamento un proyecto de ley sobre la vacunación obligatoria, que el futuro canciller Scholz respalda, para que entre en vigencia a partir de febrero o marzo.
"La situación es muy, pero muy complicada", dijo Scholz luego de reunirse con Merkel y los dirigentes de las 16 regiones del país. El ministro de Finanzas del gobierno saliente calificó las medidas de "correctas y necesarias" y subrayó la importancia de ser "claros y precisos". Además llamó a la población a vacunarse contra la covid-19 y señaló que las consecuencias de no hacerlo se están haciendo cada vez más visibles.
Fin de año sin fuegos artificiales
"Vamos a organizar actividades culturales y de ocio en toda Alemania, pero solamente para las personas vacunadas o recuperadas" de la covid-19, indicó por su parte Merkel, quien deja el poder el ocho de diciembre después de 16 años al mando del país. Se trata, agregó, de "un acto de solidaridad nacional" con el objetivo de reducir las cifras de contagios y la presión al sistema sanitario.
La regla, denominada "2G" en referencia a personas vacunadas o recuperadas, "también será extendida al comercio minorista, a excepción de las tiendas de productos básicos", aseguró la canciller saliente. Estas drásticas restricciones al acceso a la vida social para los no vacunados ha sido calificada por varios responsables políticos como un "confinamiento" para quienes no fueron inoculados. Las personas no vacunadas ya están sometidas desde hace varias semanas a restricciones en su acceso a la vía pública, pero las reglas varían y no abarcan al conjunto de las regiones que componen el país.
Para evitar las aglomeraciones durante las fiestas de fin de año, el gobierno y las regiones también prohibieron los petardos y los fuegos artificiales, muy populares entre los alemanes. Los clubes y las discotecas deberán cerrar si se rompe la barrera de 350 casos, un nivel que ya ha sido superado en la mayoría de los "lands".
Votación clave por la vacunación obligatoria
Este conjunto de medidas busca una mejora de la situación en las próximas semanas, antes de una crucial votación sobre la obligatoriedad de las vacunas. Ese escenario convence a los dos socios de coalición de los socialdemócratas, los verdes y los liberales, pero también a los conservadores de Merkel, actualmente en la oposición. Solo el partido de extrema derecha AfD se opone y ha lanzado una campaña con el eslogan "¿Vacuna obligatoria? ¡No, gracias!".
El contexto es complicado por el actual periodo de transición en Alemania, entre la salida de Merkel que dará el jueves un discurso de despedida y la entrada de Scholz, cuya elección parlamentaria no se dará hasta la próxima semana. Las restricciones impulsadas por la nueva coalición deben mostrar, según el futuro canciller, que "no hay un vacío de poder, como algunos creen en este momento".
El organismo alemán de lucha contra las enfermedades infecciosas, el Instituto Robert Koch (RKI), notificó 73.209 nuevas infecciones en las últimas 24 horas. Se trata de la segunda vez que Alemania supera los 70 mil contagios diarios. La anterior fue la semana pasada, cuando las autoridades anunciaron un récord de 75.961 casos. El RKI agregó que en la jornada hubo 388 muertes por coronavirus, lo que elevó el total a 102.178.
El 71,4 por ciento de la población de Alemania (59,4 millones de personas) fue vacunada, el 68,6 por ciento (57,0 millones) con la pauta completa, mientras que el 12,5 (10,4 millones) ya recibió una dosis de refuerzo.