Los reclamos por el servicio del agua en la provincia de Salta, no cesan y desde el Ente Regulador de los Servicios Públicos de la Provincia (Enresp), se convocó a una Mesa del Agua, para encontrar una solución a la recurrente falta del suministro. De esta manera, se citará a la empresa proveedora del servicio, Aguas del Norte, junto a representantes de las carteras de Infraestructura y de Economía y Servicios Públicos. 

En paralelo, las denuncias no se detienen y para hoy, vecinos de Capital marcharán por la mañana hacia la sede de la empresa. Esto se debe a que algunos barrios están sin el servicio desde el jueves último. Mientras que las comunidades indígenas del norte salteño, llevan adelante cortes sobre la Ruta Provincial 86, pidiendo por obras y manifestando su temor por la falta del servicio y las consecuencias que puede traer en las infancias. 

El vicepresidente del Ente Regulador, Jerónimo López Fleming, dialogó con los medios de comunicación y aseguró que debido a los constantes reclamos por la falta del suministro de agua en diferentes puntos de la provincia, realizarán una mesa de diálogo. El objetivo es buscar soluciones inmediatas, por lo que la denominada Mesa  del Agua, será hoy a las 10 en el Ente, ubicado en la calle Bartolomé Mitre 1231. 

Desde el Enresp, pretenden repasar todas las problemáticas que se presentaron desde Navidad, y que se acrecentaron hasta Año Nuevo. Por tal motivo, se invitó a distintas áreas ministeriales, como las carteras de Infraestructura y de Economía y Servicios Públicos, la propia empresa prestadora, y demás actores vinculados al tema. Desde el organismo confirmaron a este medio que son alrededor de 16 personas las convocadas. 

López Fleming aseguró que la presencia de funcionarios del Ejecutivo provincial, es necesaria "para darle prioridad a las obras y tratar de acelerar al máximo para ir solucionando el faltante en los barrios más afectados de la Capital y del interior". En ese sentido, también afirmó que la invitación se hizo extensiva al Foro de Intendentes de Salta, pues "son quienes reciben y conocen con mayores detalles los reclamos diarios", según contó a la radio FM Profesional

Desde que inició la semana, los reclamos se empezaron a visibilizar con mayor fuerza en la capital salteña. A pesar que vecinos de la zona oeste realizaron cortes desde el sábado a la noche, pues desde el jueves denunciaron la falta del servicio. Las fallas en la distribución, perjudicó a familias de los barrios La Loma, Villa Luján y 20 de Febrero

Su vocera, Silvina Choque, dijo a Salta/12, que lo ocurrido durante el fin de semana fue lo que colapsó la paciencia de los vecinos, pues el corte del servicio es algo que se vive de manera recurrente. Tras los reclamos, que empezaron a hacerse masivos desde el jueves, primero les dijeron desde Aguas del Norte, que volvería a la normalidad el sábado por la tarde, lo que no sucedió. Luego les llegó la noticia que recién volvería el lunes último, y con ese hartazgo decidieron salir a las calles.

Por eso, dieron a conocer que se movilizarán hoy a las intalaciones de la empresa, ubicada en la calle España 887, donde exigirán la normalización del servicio del agua. A la convocatoria, se sumaron los barrios La Madrid, Miguel Ortiz,  Vicente Solá y Tres Cerritos. En el caso de este último, desde agosto del año pasado que los vecinos y vecinas denuncian irregularidades en el servicio. Para ese momento, la empresa prometió la perforación de uno de los tres pozos dispuestos para la zona, pero las fallas continuaron. 

Los vecinos aseguraron que la falta de suministro del servicio "es responsabilidad de la empresa y no es un tema nuevo, sino que tiene antecedentes de varios años", pero que "ahora se tornó crítica la situación".  Consideraron que la normalización de la distribución del agua, debe darse de manera inmediata por las altas temperaturas, por lo esencial del servicio para la higiene máxima, sobre todo, en "esta crisis sanitaria por el Covid-19, y rebrote de salmonella". 

También, denunciaron que quienes tienen agua, la tienen con una presión "muy" baja y turbia. Mientras que en los lugares donde no hay, el reparto de agua por camión cisterna es insuficiente. Por eso, requirieron que sean atendidos por las autoridades de la empresa, que se garantice el servicio las 24 horas, y que, además, no se cobre el servicio que no está prestando. Pidieron la "urgente inversión en obra y mantenimiento para algo tan vital como el agua potable". 

Mientras el reclamo se va generalizando en los barrios de Salta, el presidente de la empresa, Luis María García Salado, el lunes último, brindó declaraciones a los medios donde afirmó que "no todos los lugares no tienen agua. Muchas veces la gente quiere tener agua las 24 horas, pero hoy es imposible. Hay un problema de abastecimiento de agua, llovió muy poco". 

Para los vecinos los dichos resultaron un descaro, pues sotienen que hablar del agua, es hablar de un derecho humano fundamental. "Tanto la empresa como el gobierno son responsables de garantizar el servicio", reiteraron. Desde la entidad, confirmaron ayer a este medio que las lluvias, que empezaron el lunes por la noche, "ayudaron bastante y se está normalizada la situación en muchas zonas".

Enero con subas

Fue a inicios de diciembre, que el Ente Regulador, anunció que a partir de enero se aplicaría un incremento del 28,79% en las facturas del agua. La resolución, se dio posterior a la audiencia pública no vinculante que se realizó en octubre y donde se manifestó un gran rechazo a cualquier tipo de aumento. 

Además, se resaltó la obsoleta infraestructura que tiene el tendido de agua potable en la provincia. Un ejemplo de ello, son algunos caños que tienen más de 30 años, y que se rompen constantemente.

Por eso, es que anunciaron desde el gobierno un plan de obras trienal de más de 198 millones de dólares para el recambio de cañerías, plantas potabilizadoras y depuradoras con fondos gestionados por el gobernador Gustavo Sáenz ante el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENHOSA) y el Fondo Fiduciario para el Desarrollo Provincial.

También, la empresa prestataria deberá invertir, en el mismo plazo, $442.969.314 en obras operativas e instalación de micro y macromedidores.

Una situación de preocupación y discriminación 

La situación en las comunidades indígenas del norte salteño, sigue siendo preocupante, porque desde hace décadas no puede darse una solución efectiva al desabastecimiento del agua en distintos lugares. Ese es el caso de las comunidades wichí de Los Lapachos 2 y 3, La Unión, Lucero y Sarmiento, pertenecientes al municipio de Tartagal, lo que llevó a que los indígenas, sostengan cortes en las Ruta Provincial 86 desde el lunes 3.

El dirigente de la comunidad Los Lapachos 3, Juan Pérez, contó a Salta/12 que la situación particular de la zona, se recrudeció en 2014, cuando se cortó un caño que pasaba por la comunidad de Tonono y posibilitaba la llegada al resto de los lugares. "De la noche a la mañana nos hemos quedado sin agua", expresó, y es por eso, que piden que se puedan invertir 200 metros de mangueras de 0.50 de diámetro para restablecer la conexión con otro punto que se encuentra más cercano. 

"Hemos mandado notas al intentente (Mario Mimessi), pero nunca hemos obtenido respuestas favorables", expresó. Desde hace 6 años, que las familias de las zonas se abastecen con camiones cisternas, pero la realidad es que resultan insuficente para la cantidad de personas presentes. Sólo en Lapachos 3, hay 60 familias, y la distribución no es igualitaria, sumado a que algunas no tienen los tachos para acumular agua. 

Y por tal motivo, Perez dijo que la llegada del agua a través de los camiones ya no les sirve. "Nos gustaría que nos hagan una nueva conexión y se solucione de una vez estos problemas", expresó. 

Las conexiones precarias en las comunidades

Ante la ausencia de una solución de fondo, las comunidades sostienen que la respuesta de parte del Estado es "una discriminación" hacia los pueblos indígenas. Por eso, ayer se dirigieron nuevamente hacia la Municipalidad de Tartagal, donde lo único que les preguntaron era si tenían el título de propiedad. "Yo me sentí mal porque nosotros somos nativos del departamento San Martín", expresó, en disconformidad al poco reconocimiento ancestral por parte del Ejecutivo municipal con los pueblos indígenas. 

Por su parte, la dirigente de la comunidad Sarmiento, Francisca Sarmiento, afirmó que una de las mayores preocupaciones, es la falta de agua para los niños, niñas y adolescentes. Contó que existen niños deshidratados por la falta de agua, lo que luego, les ocasiona enfermedades. En su comunidad son casi 225 familias, mientras que en Los Lapachos 2, alrededor de 300; y en La Unión, unas 30. 

"Mis nietos están enfermos y necesitan del agua", expresó la dirigenta. En su comunidad existe una llave comunitaria, pero que está autorizada para que sea abierta a las 19, de allí pasan unos 30 minutos y se corta el suministro. "Hay mucha gente y al final no alcanzamos a juntar", relató. 

Por eso, reiteró el pedido para que desde los gobiernos, sea nacional, provincial o municipal, se propicien las mangueras necesarias para hacer las reconexiones. Aunque Sarmiento cuestionó que desde las diferentes gestiones los tienen "de un lado a otro, sin respuestas ciertas". Por tal motivo, exigió que las autoridades del Instituto Provincial de Pueblos Indígenas de Salta (IPPIS), tomen el reclamo y actúen de inmediato.