Silvio Romero ya no seguirá en Independiente. Cansado por el desgaste sufrido en los últimos tiempos, el goleador prefirió cambiar de aire y ya no continuará en el club de Avellaneda, que lo despidió a través de las redes sociales, teniendo en cuenta que el ex Lanús viajará a Brasil para sumarse a préstamo al Fortaleza.  

"No sentía las ganas para afrontar lo que se viene", remarcó Romero para justificar su decisión de marcharse de Independiente después de cuatro años. "Como familia necesitábamos cambiar de aire. Le estoy agradecido a Independiente, yo traté de darle todo lo que pude y la dirigencia entendió mi necesidad", sintetizó el delantero cordobés en una entrevista con TyC Sports, en la que explicó que le contó al entrenador Eduardo Domínguez el particular momento que atraviesa: "Le planteé que era un tema familiar. Necesitamos otra cosa".

A través de sus redes sociales, Independiente oficializó la marcha de su capitán al Fortaleza de Brasil, luego de cuatro años de lucir la camiseta roja. "Silvio Romero fue cedido a préstamo con opción de compra al Fortaleza de Brasil. Cuatro años, más de 50 goles y una copa. Éxitos para lo que viene, Chino", señaló el club de Avellaneda.

Si bien el pase es a préstamo, Romero ni siquiera quiere pensar en un eventual regreso tras la experiencia en Brasil. "Es prematuro pensar en una futura vuelta a Independiente. Lo que sí le agradezco a los hinchas que me apoyaron estos cuatro años y ahora les pido que sigan alentando a este equipo, que tiene mucho jóvenes que necesitan del aliento", enfatizó el ex jugador de Instituto y Lanús. 

El cordobés dijo que se va del club "con mucha nostalgia, por todo lo vivido durante cuatro años, sobre todo por los compañeros, por los utileros, los cuerpos técnicos que pasaron y por la gente que brinda el cariño día a día". Sin embargo, dejó en claro esta vez tomó la decisión de irse, algo diferente a otras ocasiones en las que también tuvo ofertas, porque "el desgaste ya era mucho".

"Necesitábamos un cambio en el entorno familiar, todos saben los problemas que acarreamos y cambiar de aire por ahí nos viene bien como familia y nos pusimos de acuerdo", sostuvo el delantero, cuyo hijo Mateo requiere un tratamiento especial porque padece parálisis cerebral.