El área metropolitana vivió otro día de infierno este viernes. Con las temperaturas en niveles récord, el sistema de distribución eléctrica volvió a mostrar sus falencias y hasta la hora de cierre de esta edición (21:30, último registro consultado), la cantidad de usuarios (domicilios) sin electricidad se mantenían cercanos a los 90 mil. Las protestas en las calles del sur de la ciudad de Buenos Aires parecían crecer en tensión, ya que en no pocos casos se trata de vecinos que llevan varios días sin luz o con servicio intermitente desde antes de las fiestas, con la electricidad que vuelve algunos días, pero no todos, y por pocas horas. Los dramas personales y familiares se multiplican, pero las deficiencias se repiten. También las diferencias en el servicio entre la prestadora en los barrios y las localidades suburbanas del norte y la de las zonas del sur. 

La experiencia de los vecinos les hace comprender que ya no se trata simplemente de un problema de "horas pico". El seguimiento que hace el ente regulador eléctrico (ENRE) sobre la evolución de los cortes de las dos prestadoras, Edenor y Edesur, señala que la masividad del problema arranca cuando empieza a subir la temperatura y, con ello, la demanda. Pero no se restablece la normalidad del suministro cuando pasan esas horas pico. Repasando la evolución de los cortes de este viernes se observa lo siguiente:

* Hasta las 11,30 horas, el servicio se mantenía dentro de parámetros "razonables". Cada una de las distribuidoras exhibía entre 5000 y 7000 "usuarios" (cada usuario es un domicilio, no importando cuántos habitantes moran en él, o si se trata de una casa vivienda o un local), incluídos los que estuvieran dentro de los denominados "cortes programados" por mantención o reparación. A partir de esa hora, la temperatura en el área urbana superó los 35 grados centígrados.

* 11,30 horas en adelante. Allí se produce la diferenciación de la prestación. Mientras los cortes de Edenor se mantienen durante unas tres horas por debajo de los 10 mil usuarios sin servicio, en el caso de Edesur ya para las 14:40 superaban los 50 mil.Desde las 14:00, los termómetros marcaban los 40 grados. 

* 14:30 en adelante. La curva de cortes de Edenor se mantuvo en un rango de 12000 a 15000 usuarios hasta las 17:30, cuando empieza a registrar picos intermitentes de 20 mil (subía y volvía a bajar). La curva de Edesur, en cambio, no dejaba de trepar. a las 15:55 horas superaba los 60 mil, nunca más bajó de 50 mil y a las 18:35 pasaba los 70 mil. 

Técnicos del ente regulador marcan aquí una diferencia. "Edesur echó mucha gente de sus equipos técnicos, incluso jerárquicos en estos años, y no tiene capacidad para reparar y restituir el servicio en poco tiempo. Esto se ve cada vez que hay un evento que afecta el servicio", confió un especialista en el tema. Esta falta de profesionales es lo que, según aseguran entidades de consumidores, también afectó el mantenimiento de equipos. 

El mapa de los cortes hacia las 17 horas señalaba que, en el área de Edesur, había unos 65 mil "usuarios" sin servicio. De ellos, 20 mil se concentraban en los barrios de Pompeya, Mataderos, Liniers y Parque Chacabuco, al sur de CABA. Nada menos que 11 subestaciones o centros de alimentación mostraban fallas o habían salido de servicio. Lugano, Villa Riachuelo y Soldati aportaban otros 3000 afectados, dentro de CABA. 

En el área de Edenor, el total de usuarios sin luz a la misma hora alcanzaba a 14500. La mitad correspondían al segundo y tercer cordón del conurbano (Virrey del Pino, Marcos Paz y Merlo, 7000 entre los tres distritos).

Y lo dicho con respecto a la falta de reflejos para reparar las fallas: si el máximo de cortes se registró a las 19:30, con 94.400 usuarios sin luz (77 mil de Edesur), para las 21:20 horas, el total había descendido a 89.000. Pero, de ellos, 76.385 usuarios afectados eran de Edesur.