El trabajo de los brigadistas que buscan sofocar el incendio forestal en las cercanías de Bariloche "ha evolucionado favorablemente", aseguró el presidente de Parques Nacionales, Lautaro Erratchú. De todos modos, advirtió, los equipos que desde hace un mes y medio enfrentan las llamas que, desde hace un mes y medio consumen hectáreas de flora en el Parque Nacional Nahuel Huapi, llevan adelante "un combate de largo aliento" para lograr extinguirlo.

“Nos queda como activo el incendio importante en el Parque Nacional Nahuel Huapi, en Río Negro, alrededor de 70 kilómetros de la ciudad de Bariloche, en la zona de Lago Martin y Lago Steffen, que arrancó el 7 de diciembre y se está trabajando muy fuertemente”, detalló el funcionario. En ese foco, “hay 150 personas trabajando entre brigadistas, personal técnico y personal de apoyo, sumado a seis aviones hidrantes, dos helicópteros con helibaldes, varias motobombas instaladas y varios camiones autobombas de Parques Nacionales”, explicó.

El clima dio un respiro

En tanto, en los últimos días, en la zona la temperatura bajó y se registraron algunas lluvias, lo que permitió un trabajo más constante de los brigadistas y de los medios aéreos.

“Podemos decir que en las últimas horas el incendio ha evolucionado favorablemente sin perjuicio de que todavía está activo, que seguimos trabajando y nos preparamos para un combate de largo aliento, yo creo que va a llegar unos cuantos días más de trabajo hasta su extensión”, evaluó Erratchú.

El funcionario indicó que que la situación de incendios en áreas protegidas es consecuencia del cambio climático y que las temperaturas son más elevadas, lo que termina provocando “sequías importantes en diversas zonas”. Por ejemplo, explicó, eso fue lo que sucedió “la semana pasada en el Parque Nacional Río Pilcomayo en la provincia de Formosa, en el Mburucuyá y el Iberá, de Corrientes, que fueron controlados en algunos casos y extinguidos totalmente en otros”.