La Agencia Nacional de Seguridad Vial, junto a las provincias y municipios de todo el país, realizaron este fin de semana un nueva edición del operativo Alcoholemia Federal: efectuaron en simultáneo, en distintos lugares del país, miles de test para controlar y disminuir la circulación de conductores en estado de ebriedad. Aunque los resultados finales de los controles de todas las provincias aún no se han publicado, ya se observó que es en las provincias que tienen normativa alcohol cero donde mayor cumplimiento se registró. 

En el mes de diciembre, en tanto, el 6% de las alcoholemias fueron positivas, mientras que el 92% de las y los conductores controlados circulaban con nivel cero de alcohol en sangre. De este porcentaje, la mayoría eran mujeres. Entre las alcoholemias positivas, se detectaron resultados de hasta 2,90 g/l, situación que deja en evidencia la necesidad de continuar trabajando para erradicar el alcohol de la conducción.

"Este verano, en el que millones de argentinos y argentinas se trasladan entre los distintos destinos turísticos del país para disfrutar de sus vacaciones, es fundamental que entiendan a los riesgos que se exponen cuando se combinan el alcohol y la conducción. Tomar y manejar no es bueno, no es divertido y lo único que puede generar son consecuencias irreparables", apuntó el director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano.

El programa de Alcoholemia Federal, un trabajo coordinado entre Nación, provincias y municipios, ya lleva 14 ediciones consecutivas, apuntando a disminuir la circulación de conductores bajo los efectos del alcohol, y sobre todo, a concientizar sobre los riesgos que genera. “En nuestro país, la estadística es clara en este aspecto, el alcohol está presente en 1 de cada 4 siniestros viales que terminan en muertes. Y por eso impulsamos el proyecto de Ley de Alcohol Cero al volante en todo el territorio nacional, para comenzar a lograr verdaderamente un cambio en la cultura vial de país que nos permita salvar muchas vidas que hoy se pierden en siniestro viales evitables. El control es parte fundamental del cambio cultural que buscamos. Cada conductor en estado de ebriedad detectado, es un posible siniestro vial que se evita", evaluó el funcionario.