Amnistía Internacional (AI) dijo este martes que en Israel hay una política de "apartheid" hacia los palestinos, en un informe que fue considerado "valiente y justo" por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y tachado de "falso" por el gobierno israelí. El término apartheid ya había sido usado por Human Right Watch (HRW) y otras ONGs el año pasado al referirse al trato de Tel Aviv hacia los palestinos y los árabes israelíes, descendientes de los palestinos que permanecieron en sus tierras tras la creación de ese Estado, en 1948.
"Las políticas crueles de segregación, de desposesión y de exclusión de Israel en esos territorios equivalen claramente a un apartheid", declaró la secretaria general de AI, Agnes Callamard, durante una conferencia de prensa en Jerusalén, poco después de que se publicara el informe. "Vivan en Gaza, en Jerusalén Este, en el resto de Cisjordania o en Israel, a los palestinos se los trata como a un grupo racial inferior y sistemáticamente se les quitan sus derechos", aseguró.
El informe de la ONG da cuenta de traslados forzosos, detenciones administrativas, torturas y homicidios ilegítimos tanto en Israel como en Cisjordania ocupada y Gaza, donde entre 2018 y 2019 se produjeron las "marchas del retorno", durante las que tropas israelíes disparaban a los manifestantes y mataron al menos a 214 civiles, incluidos 46 menores.
El documento de 182 páginas concluye que "las autoridades israelíes deben rendir cuentas por cometer apartheid" contra los palestinos, ya que constituye un crimen de lesa humanidad según las definiciones del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI) y la Convención contra el Apartheid.
Bronca de Israel
Incluso antes de la publicación del informe, el gobierno israelí accedió a su contenido y reaccionó con vehemencia al tildar a AI de "antisemita" por "negar el derecho a existir del Estado de Israel" y "usar un lenguaje extremista". El ministro de Relaciones Exteriores israelí, Yair Lapid, consideró que el documento "recoge las mentiras propagadas por las organizaciones terroristas".
"Israel no es perfecto, pero es una democracia ajustada al derecho internacional, abierta a la crítica", sostuvo Lapid, quien enfatizó: "No me gusta decir que si Israel no fuera un Estado judío nadie en Amnistía se atrevería a atacarlo, pero no veo otra explicación".
Callamard no tardó en salirle al cruce. "Criticar las prácticas del Estado de Israel no es en absoluto una forma de antisemitismo. Amnistía denuncia enérgicamente el antisemitismo", aseguró la responsable de AI, quien agregó: "Lo que decimos es que en 2021 y en 2022 hay apartheid en Israel, no sugerimos que hubiera un sistema de apartheid en 1948".
Elogios de la ANP y Hamás
Durante la rueda de prensa, Callamard rechazó las acusaciones de que su organización "estigmatiza" a Israel, recordando que AI publica regularmente informes sobre Irán, país archienemigo de Israel. Por su parte la ANP, que gobierna en una parte de Cisjordania ocupada, elogió a la ONG por su trabajo "valiente y justo" en nombre del pueblo palestino.
"El informe es una afirmación detallada de la cruel realidad del racismo arraigado, la exclusión, la opresión, el colonialismo, el apartheid y el intento de borrado que el pueblo palestino ha soportado desde la Nakba (con la creación de Israel en 1948)", indicó el ministerio de Exteriores en una nota.
A su vez el movimiento Hamas, que controla la Franja de Gaza y que tanto Estados Unidos como la Unión Europea (UE) consideran un grupo "terrorista", aplaudió la "profesionalidad" del trabajo de AI. El grupo islamista aseguró que el informe "describe la trágica realidad" de la población palestina "por lo que es".
El "documento profesional" de AI "pone los hechos en perspectiva" al "considerar la entidad de ocupación (Israel) como apartheid", dijo el vocero de Hamás en la Franja, Hazem Qasem. Según Qasem, la investigación de la ONG "se ha adherido a los principios de profesionalismo objetivo, y ha presentado los hechos sobre el terreno tal como son", denunciando "las prácticas de ocupación contra el pueblo palestino en todos los niveles".
Pedidos a la ONU y a la CPI
Callamard llegó la semana pasada a Jerusalén y desde entonces se ha reunido con gente tanto en Cisjordania como en Israel, pero no ha podido entrevistarse con ningún responsable israelí, pese a que presentó una solicitud en octubre. En su informe, AI exhortó al Consejo de Seguridad de la ONU a imponer un "embargo" a las ventas de armas a Israel, que en 2021 libró una guerra contra Hamas, y también pidió que se ordenen "sanciones" contra los responsables israelíes "más implicados en el crimen de apartheid".
Además, instó a la Corte Penal Internacional (CPI), que el año pasado dirigió una investigación por "crímenes contra la humanidad" contra los palestinos, a "añadir el crimen de apartheid" a su caso. Israel realiza una campaña diplomática para convencer a los países occidentales de apoyarlo frente a la CPI. Pero, para AI, ha llegado el momento de que la comunidad internacional termine con el "cansancio" del conflicto israelo-palestino, señaló Callamard, en tanto el proceso político de paz sigue en punto muerto.
"La respuesta internacional al apartheid no debe seguir limitándose a condenas anodinas y declaraciones ambiguas. A menos que abordemos las causas fundamentales, la población palestina e israelí seguirán bloqueadas en el ciclo de violencia que ha destruido tantas vidas", advirtió la secretaría general de AI.