Al menos 58 personas murieron este martes por un fuerte temporal que cayó sobre Petrópolis, ciudad serrana del estado de Río de Janeiro, mientras que 301 quedaron sin hogar.

Durante la tarde del martes, la tormenta fue tan intensa --en cuatro horas Petrópolis recibió el equivalente a las lluvias que esperaba para todo febrero-- que provocó inundaciones repentinas y al menos 189 deslizamientos de tierra, consignó el diario Folha de S. Paulo. 

"Es una situación casi de guerra", dijo Cláudio Castro, gobernador de Rio de Janeiro, desde la zona del desastre.

Según se puede ver en las imágenes captadas por teléfonos celulares de los vecinos, el agua acumulada circuló con fuerza por las calles de la ciudad, llevándose a su paso viviendas y automóviles, en medio de la desesperación popular.

Este miércoles, Defensa Civil trabajaba para consolidar el número de víctimas y de desaparecidos, ya que “hay mucha dificultad para acceder a parte de la ciudad”. Mientras tanto, “los residentes buscan a familiares en las calles, hospitales y comparten fotos en las redes sociales”, describió el diario brasileño.

"Es desesperante. Nunca habríamos podido imaginar que aconteciera una cosa así", dijo Elisabeth Lourenço, una vecina que llegó a juntar algunas pertenencias en dos grandes bolsas antes de dejar su hogar. "En el peor momento de la lluvia, cayó mucho lodo de lo alto de la colina y las ramas de los árboles cayeron sobre la parte trasera de mi casa", contó a la AFP.

Según los medios locales, todos los habitantes de Alto da Serra, un barrio popular construido en la ladera de un cerro a unos veinte minutos del centro histórico, se vieron obligados a desalojar la zona. "Estaba cenando cuando empezó la tormenta. Mi hermano vino a buscarme y me dijo: 'tenemos que irnos, el cerro se está derrumbando'", recordó Jerónimo Leonardo, de 47 años, cuya casa, relativamente conservada, da a la ladera sepultada por el deslizamiento de tierra.

Operativo

Desde Rusia, donde está de visita oficial, el presidente Jair Bolsonaro ordenó a sus ministros desplazarse a la zona del desastre para ayudar al gobierno de Río de Janeiro y al municipio de Petrópolis. El ministro de Desarrollo Regional, Rogério Marinho, aseguró que el mandatario estará el viernes "en el lugar".

Actualmente, informó Defensa Civil, hay 184 personas albergadas en puntos de apoyo que funcionan en escuelas de la ciudad, mientras que los puestos de salud y los hospitales están repletos de heridos.

Además, se están enviando ocho ambulancias a la ciudad para ayudar a las víctimas y diez aviones fueron puestos a disposición para arribar a la ciudad este miércoles por la mañana, precisó el gobierno.

Trabajan en la búsqueda de sobrevivientes 400 efectivos militares y decenas de bomberos, con perros, vehículos 4x4 y botes. Hay zonas donde la ayuda, sin embargo, aún no ha podido llegar.

Tras lo ocurrido, las clases en escuelas locales y los servicios administrativos de la prefectura quedaron temporalmente suspendidos.

Lluvias intensas

No es la primera vez que en la región se registra un temporal de esta magnitud. En 2011, Petrópolis y las ciudades vecinas sufrieron una de las peores tragedias de la historia de Brasil, con poco más de 900 muertos y más de 100 desaparecidos a causa del deslizamiento de tierra de los morros.

Además, más de 50 personas murieron en las últimas semanas con las lluvias e inundaciones en San Pablo y Minas Gerais, estados vecinos al de Río de Janeiro.