Elina Rivero tiene 27 años. Es conocida en el ambiente punk, como la Cebra. Es una joven madre de dos hijos con una fuerte personalidad, incapaz de no reaccionar ante un violento cachetazo, como el que le prodigó una mujer policía. Lo que vino después fue una lluvia de golpes. Catamarca y Cafferatta, es el lugar de donde se la llevaron desvanecida y bañada en sangre, por el corte en su cabeza. Una hora después el SIES se la llevó desnuda, hacia el hospital Centenario, y luego al HECA, donde estuvo una semana en coma. "En la comisaría séptima abusaron de mí como mujer, me desnudaron, me golpearon, me robaron mis pertenencias hasta las llaves de mi casa". En esta entrevista, la primera luego de haber logrado el alta médico, aclara porqué nunca pudo haber sido realidad que ella misma se golpeara la cabeza con las paredes del calabozo donde la encerraron, tal como afirmaba la versión oficial que fue reproducida por un portal digital. El mismo sitio web que puso en boca de su pareja Ariel que "Elina se empastillaba". Finalmente la joven especula porqué la policía la golpeó tan brutalmente.

El viernes 12 de mayo, en el teatro Vorterix de Salta y Cafferatta hubo un recital de "Sin ley". Hacia allá fue Elina. Iba a ser una noche especial, pero todo cambió luego de un discusión con otra joven en el minimarket Pacific de Catamarca y Cafferatta, a metros de la seccional séptima. Una mujer "policía gorda y rubia", la encaró y "me metió un cachetazo".

-¿Qué pasó aquella noche?

-Me peleé con una chica y entonces la policía se metió a separarnos y una mujer policía me metió un cachetazo, asi que reaccioné. Le digo 'que haces'? 'He viste que a las boludas como vos, cómo le cabe' me dice la milica. Y ahí me pegó una patada en el pecho y me golpeé contra la pared. Me quise defender y se metió un policía hombre y me siguieron golpeando. Me hicieron dar tres veces la cabeza contra la pared, y ahí me la rompí. Todo pasó en la vereda de enfrente al minimarket, donde se hacen las previas.

-¿Qué pasó después?

-Mi amiga me contó que me llevaron inconsciente entre dos milicas una de cada brazo, y que iba arrastrando los pies asi que un policía me llevantó de los tobillos porque la gente miraba. Yo iba sangrando por los golpes en la cabeza. Como mi amiga y otros chicos fueron a preguntar qué era lo que había pasado, le dijeron que se fueran porque sino les iba a pasar lo mismo que a mí. 'Váyanse porque sino van a terminar encerrados como ella', les gritaron. Según me dijo mi amiga que se quedó en la puerta estuve una hora en la seccional, hasta que vino al SIES a llevarme. Me sacaron inconsciente y desnuda, solo con la bombacha y el corpiño.

--¿Quien te desnudó?

--No tengo idea, me faltó el jean, la remera y la campera, solo me devolvieron los zapatos.

-¿Sabes bien que pasó dentro de la comisaría?

-No tengo idea, pero no tengo signos de que hubiese pasado nada peor. Lo que creo que pasó es que sacaron la ropa, porque estaba toda llena de sangre, para que no pudiera demostrar nada, para no poder probar los golpes. Es más cuando fui al Hospital Centenario a buscar mi ropa le dijeron que había llegado sin ropa.

-¿Porqué pensás que pasó esto?

-Como la vez pasada no me pudieron pegar porque estaba bien, esta vez como tenía un trago de más, abusaron de mí. Abusaron de mí como mujer me sacaron mis cosas, me pegaron y me dejaron en coma una semana, sin saber si me iba a poder levantar y caminar. Ahora empecé a hablar bien de casualidad, pero me cuesta mucho, tengo mareos, dolores, y un ojo complicado. Todavía arrastro los pies para caminar, y me dijeron los médicos que no puedo golpearme de nuevo la cabeza, porque me pueden dar convulsiones. No sé cuales son las secuelas con las que puedo quedar, porque tengo un derrame cerebral. Me sedaron y me entubaron porque no podía respirar sola, me tenían que alimentar con sonda.

 

“Creo que me sacaron la ropa, porque estaba toda llena de sangre, para que no pudiera demostrar nada".

 

Elina tiene una cicatriz en su nuca de cinco centímetros y otros tantos puntos. Ahora la joven recuerda que ya una vez, hace poco tiempo había tenido problemas con los policías de esa comisaría. "Era el recital de las Manos de Filippi, el viernes 24 de marzo. Tuvimos un altercado en la puerta y llego la policía, una mujer policía me sacó de mal modo y me llevaron a la comisaría. Me maltrataron pero no dejaron asentado nada. Esa vez me pusieron en el patio, atada a una escalera. Me acuerdo que había menores ahí, también atados y golpeados, era como un patio, todos mezclados. Me habían llevado a las piñas también.

-¿Porqué te habían llevado detenida?

-Porque no nos queríamos correr de la puerta del teatro. Pero también había ocurrido una cosa grave: hubo un problema entre un patovica del lugar el Murder, con una pareja: a la chica le quebraron la pierna de una patada, y como se metió el novio, se lo llevaron para dentro del teatro, y lo recagaron a palos durante una hora. Todo estuvo arreglado con la comisaría. Yo estaba al lado de una chica que filmó el golpe y la cana vino y le sacó el teléfono para borrar todo. Esta piba vende posters, y canta en una banda que se llama Las crudas y había filmado cómo le pegaron a la otra chica. El patovica es el Murder, que es tuerto, y que está arreglado con la séptima.

-¿Qué pensás de la comisaría séptima?

-No sé qué les pasa, porque están a la vuelta de un boliche en el que se hacen recitales y va todo tipo de gente, pero tienen una bronca especial parece con alguna gente. Yo he visto como le sacan la plata a los chicos que cuidan los autos en esa zona. Los ponen contra la pared, los golpean y le sacan la plata. Y después se les ríen en la cara, y si uno les dice algo, mirá como terminas, como yo, en coma.