Comprometido en la pelea por la permanencia en el torneo de Primera –el domingo disputará un partido de vital importancia ante Olimpo, en Bahía Blanca—, Huracán enfrentará hoy el desafío de pasar de ronda en la Copa Sudamericana cuando reciba a los venezolanos de Deportivo Anzoátegui. No la tendrá nada fácil el Globo en Parque Patricios, porque deberá remontar la dura derrota por 3 a 0 que sufrió el 1º de marzo en Puerto La Cruz, en el partido de ida ante el equipo que dirige el argentino Nicolás Larcamon. Esta caída obliga al conjunto de Juan Manuel Azconzábal a ganar por cuatro goles de diferencia para pasar de fase en el certamen del que fue subcampeón en 2015.

Si bien el cuerpo técnico quiere dar batalla en el torneo sudamericano, Huracán presentará un equipo alternativo, obligado por las seis bajas de titulares por suspensión. El lateral derecho Nicolás Romat y el volante Lucio Compagnucci fueron expulsados en la ida, que coincidió con el debut oficial del Vasco Azconzábal, mientras que el arquero Marcos Díaz, el zaguero Federico Mancinelli y el mediocampista Matías Fritzler deben purgar fechas de suspensión que arrastran de la participación en la Copa Libertadores 2016. Lo mismo para el volante Mauro Bogado, el único de los sancionados que no fue titular en el último partido del sábado ante el líder Boca, que terminó en empate 1 a 1. A esto se le suma que Mariano González e Ignacio Pussetto arrastran molestias y serían resguardados.

Con este panorama, Azconzábal pondrá un equipo más ofensivo, con Patricio Toranzo y Daniel Montenegro de enganches pero con intérpretes que no vienen teniendo continuidad, como es el caso del juvenil Leandro Cuomo.

Del otro lado estará Deportivo Anzoátegui, que llega con la ventaja de los tres goles a favor y con el envión del buen presente en el torneo local, pero que recién llegó ayer a Buenos Aires, tras un largo y tedioso viaje que emprendió el viernes, tras caer de visitante ante Caracas por 1 a 0, en el partido de ida por los cuartos de final de la liguilla venezolana.