Han pasado más de cuarenta días desde el inicio de la invasión rusa en Ucrania. Las imágenes de la masacre de civiles descubierta tras la retirada del ejército ruso en el norte de Kiev, en Bucha, una ciudad sembrada de cadáveres, son escalofriantes. Allí, los testimonios cuentan ejecuciones sumarias, violaciones y tortura. El Kremlin, por su parte, grita conspiración. ¿Cómo sobreviven psíquicamente lxs refugiadxs ucranianxs a la angustia que aumenta a medida que la violencia se convierte en barbarie?

Ievgeniia Sokova, refugiada ucraniana de 31 años, es de una ciudad del sureste de Ucrania que fue bombardeada por el ejercito ruso, Melitopol. Comprometida con la lucha por los derechos humanos, trabaja en una asociación que lucha contra las hepatitis víricas y las enfermedades del hígado, y organiza un festival de cine con Amnistía Internacional Francia para alertar sobre las violaciones de los derechos humanos, incluida la libertad de expresión. Aceptó contarle a Las12 su lucha diaria en esta brutal experiencia.

En primer lugar Ievgeniia, ¿cómo te sentís?

Anoche no dormí, no pude dormir. Cerré los ojos y vi cuerpos. Cuerpos en el suelo, cuerpos encontrados en el suelo: civiles, niños, familias, mujeres violadas.... Lo que ocurrió en Boutcha... no tiene explicación, es tan inhumano que no se puede entender. Y me temo que lo que descubramos en Mariupol será mucho peor. Lo cual es inimaginable en sí mismo. Esto es la guerra, y continúa. El terror, el horror mismo.

Sos ucraniana de origen ruso, ¿cómo se traduce esta doble identidad?

Yo soy precisamente esa « rusa » que Putin quiere « proteger ». Mis abuelos y mis padres son rusos, así que soy de origen ruso, pero como nací en el territorio de Ucrania, que declaró su independencia en 1991, tengo la nacionalidad ucraniana. Además, hablo ruso desde toda mi vida, es mi lengua materna, y nadie me ha discriminado nunca por este motivo. Mis padres, mi abuela, todos hablan ruso sin ningún problema.

Entonces, ¿cómo te representas a vos misma?

Cuando me presento digo que soy ucraniana, que he vivido toda mi vida en Ucrania y así me represento. Hoy se habla de un supuesto « fascismo » y « nazismo », pero Ucrania es un país democrático y abierto a diferentes culturas, el bilingüismo fue una riqueza para nosotros. Esta historia sobre la caza de « fascistas » que odian a los rusoparlantes es exagerada y engañosa. Puede haber gente radicalizada y ultranacionalista como en todas partes, pero no son representativos de la mayoría de la población ucraniana.

Y desde el comienzo de la guerra, ¿qué pasa con este bilingüismo?

Cada vez más, es una cuestión de elección política, muchas personas de habla rusa han hecho esta elección ahora. Dicen: “No quiero que alguien venga a "salvarme" porque hablo ruso. No quiero seguir atada por el idioma a este país agresor.” Personas que nunca han hablado realmente ucraniano en su vida cotidiana ahora lo hablan y es un verdadero acto político para ellos. Qué paradoja: los rusos vienen a “salvar” a los rusoparlantes que, por sus horribles crímenes cometidos en Ucrania, ya no quieren hablar ruso.

¿Lo viven como un acto de afirmación ante una asimilación forzada?

Exacto. El pueblo ucraniano muestra hoy un gran valor porque durante siglos el Imperio Ruso, la Unión Soviética, Rusia, siempre han reprimido a los ucranianos, privándoles de su libertad, de su lengua. En el siglo XIX hubo decretos especiales del Imperio Ruso que prohibían publicar libros en lengua ucraniana o representar obras de teatro en ese idioma. Con la Unión Soviética se produjo un verdadero genocidio del pueblo ucraniano con varios millones de muertos en 1932/1933 a causa de las hambrunas artificiales creadas especialmente para matar a los ucranianos. Al final de la Segunda Guerra Mundial, continuó con todas las represiones de Stalin, las deportaciones a campos de trabajo, como el Gulag... Si tomamos la historia de Ucrania durante varios siglos, Ucrania nunca ha sido vista como un país soberano e independiente.

Putin ha llegado a hablar del país feminizándolo como si así lo hiciera inferior.

Sí, incluso peor que eso. A principios de febrero, dijo esta frase: “Te guste o no, guapa, tendrás que aguantar”. Habla de Ucrania como algo que le pertenece. Por ello, utiliza una fraseología machista para hablar del país, estableciendo un paralelismo entre su deseo de dominio territorial y la violación: “Hacé lo que te digo, no te muevas y si no te gusta es tu problema”. No puede aceptar el hecho de que Ucrania quiera ser libre. Luego fue más allá. El 21 de febrero, en su discurso para justificar su decisión de reconocer la independencia de los territorios separatistas de Donbass, en el este de Ucrania, Putin dijo que Ucrania no existe, que fue totalmente construida y creada por la Rusia bolchevique. Esto es tan falso y absurdo, que no quiero ni comentar. Todo me parece irreal en 2022.

¿Cómo se traduce la transición de lo real a lo irreal?

En el sentido de que no debería ser posible mantener ese discurso, esas declaraciones no son aceptables. En el sentido de que Rusia está justificando la guerra. A pesar de que la guerra en Ucrania ya lleva 8 años, para mí era imposible una guerra de tal magnitud, que estamos presenciando hoy, una guerra iniciada por “nuestros hermanos rusos”. En mi conciencia, como imagino que en la de muchos ucranianos, la guerra siempre ha estado presente como algo que tuvo lugar en el pasado y que pertenece al pasado. Hoy, las catástrofes del pasado se repiten con una rapidez brutal. Intenté encontrar una lógica en esto, en este cambio radical de paradigma. El país que luchó contra el nazismo se convierte a su vez en un país agresor y destruye Ucrania con el pretexto de recrear una escena de liberación.

Otra barrera franqueada es la de Chernóbil.

Sí, una catástrofe humana y ecológica que forma parte de nuestro pasado colectivo. El fantasma de esta catástrofe se cierne hoy sobre nosotros, porque los ocupantes rusos han tomado como rehenes dos centrales nucleares: la de Chernóbil y la de Energodar, que es la mayor central nuclear de Europa. Se trata de un verdadero acto terrorista que amenaza a toda Europa, si no a todo el planeta. En resumen, todo lo que creía está en cuestión.

¿Putin habla de nazis sin mencionar a los judíos, el objetivo de los nazis era principalmente exterminar a los judíos, es un discurso muy paradójico

Esto también es parte de la propaganda de Putin, en su omnipotencia, ni siquiera necesita explicar nada, ni al mundo ni a la población rusa. Utiliza esas grandes palabras históricas que todo el mundo conoce, “nazismo” y “fascismo”. Cuando dice “liberamos a Ucrania del fascismo” activa una cantidad de códigos subyacentes, pero completamente deshistorizados. ¿De qué nazismo estamos hablando si nuestro presidente es judío?

Una respuesta pacifista parece obsoleta dada la situación.

Ucrania es un Estado pacifista y democrático. Lo que la gente hace al tomar las armas hoy es proteger su país, su hogar, su familia porque el enemigo ha venido a destruirnos. Aquellos que cuestionan la defensa de un país soberano frente a un agresor con ambiciones imperialistas, quiero que todas esas personas que me hablan de pacifismo sientan lo que yo siento desde el 24 de febrero. Ya no duermo, ya no como, he perdido peso, lloro en cuanto desaparece la red de móviles e internet, temiendo lo peor para mi familia. ¿De qué clase de pacifismo estamos hablando si mis padres están ahora ocupados por el ejército ruso y no pueden salir de la ciudad? ¿De qué clase de pacifismo estamos hablando si los rusos bombardean hospitales, maternidades, escuelas y edificios de apartamentos? De qué clase de pacifismo estamos hablando si más de 100 niños han sido asesinados por el ejército ruso, más de 100 niños han sido heridos, algunos muy graves. Los ucranianos no tienen opción al pacifismo. No fue Ucrania la que atacó, Ucrania fue atacada. Y hoy lucha por su futuro, por el derecho a existir.

¿Cómo aguantas psicológicamente ?

En primer lugar, tengo un gran apoyo de mis amigos.

También intento sacar mis emociones y pensamientos: llevo un "diario de guerra" en Facebook. No tenía intención de escribir nada, pero escribí el primer post porque sentí pánico. Atraesé todo esto de manera terrible y necesitaba contarle al mundo lo que está pasando, hacer correr la voz, pedir ayuda, que alguien pare esta guerra cuanto antes. Al principio me confié y pensé que la guerra no iba a suceder. Pero a medida que pasaba el tiempo se volvía más y más real, dramático, mis padres atrapados, sin poder salir, la situación empeorando...

¿Cómo ves el futuro?

No sé cuándo terminará esta guerra, pero Putin llegará hasta el final. Pero lo que me aterra aún más es que ahora sé que la guerra es posible, y con esta tecnología de la muerte que avanza cada año, tengo un verdadero temor por el futuro: los robots sustituirán a los humanos, tendremos armas de nueva generación. Será muy fácil instalar un verdadero régimen totalitario, y los demás países tendrán miedo de intervenir. Lo que está ocurriendo en Ucrania me afecta a muchas cosas. Todo lo que he leído en teoría, ahora lo vivo en la práctica: las emociones que siento, las imágenes de las ciudades bombardeadas... Todo esto lo tomo como una experiencia ya que no tengo opción de no vivirlo, ahora entiendo mejor algunas cosas. Y creo que los ucranianos estarán más unidos en el futuro, tras esta experiencia de los refugiados.

¿Qué lección por así decirlo, sacas de esta experiencia ?

Un día, en mi trabajo de derechos humanos, conocí a una mujer que perdió a su familia durante el genocidio de Srebrenica, nos contó su historia y dijo que, a pesar de todo lo que había pasado, decidió elegir la luz, "si elijo el odio, no seré mejor que ellos y este odio me matará también un día". Y quiero vivir. Si elijo el odio, no podré vivir, me convertiré en ese agujero negro que sólo puede producir odio". Nunca pensé que esta palabra me serviría personalmente, pero ahora es un ejemplo para mí que intento seguir. No es fácil, pero lo intento. A pesar de las cosas por las que pasó, eligió mantener la vida dentro de ella porque el odio lo mata todo. Esta enseñanza resuena profundamente en mí hoy.