Funcionarios del gobierno nacional calificaron como una “marcha política” fogoneada desde la oposición al denominado “tractorazo” de ayer a Plaza de Mayo. Fue “una actividad netamente política de los sectores cercanos a Juntos por el Cambio”, la definió el jefe del bloque de diputados del Frente de Todos, Germán Martínez. En la misma línea, la portavoz Gabriela Cerruti lamentó que "dirigentes de Juntos por el Cambio hayan encabezado una protesta cuyo documento final caracteriza al Gobierno legítimamente elegido por el pueblo como “vándalos y usurpadores”.

“Ya hace mucho tiempo que los sectores de productores supuestamente autoconvocados tienen vínculos muy aceitados con Juntos por el Cambio”, expresó Martínez y recordó que la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, convocó a la protesta. “Ya hace mucho tiempo que los sectores de productores supuestamente autoconvocados tienen vínculos muy aceitados con el PRO en su momento y ahora con Juntos por el Cambio”, recordó el diputado santafecino. Admitió que “está muy bien que cada uno pueda expresar sus ideas” y que lo único que estaba haciendo con su comentario era “caracterizar la convocatoria”.

Cerruti, por su porte, cuestionó al jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta por participar de la marcha y "no contribuir a la convivencia democrática". "Esto demuestra las motivaciones políticas, y la decisión de JxC de defender a un puñado de empresas que se benefició de manera inesperada con la guerra en Ucrania. Una vez más, como siempre lo han hecho, promueven la concentración del ingreso en manos de unos pocos y en desmedro de millones de argentinos", agregó.

El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, consideró que los manifestantes que participaron de la movilización “no son el campo" y remarcó que "las principales entidades agropecuarias no quisieron acompañar el reclamo". “El tractorazo lo lleva adelante un sector que es un brazo político de Juntos por el Cambio”, dijo Kulfas. El ministro de Desarrollo Productivo también se mostró alarmado por “el nivel de virulencia” de la manifestación. “Leía que decían ‘devuélvannos nuestro país’. El país no es de ellos, el país es de todos”, sentenció y agregó: “No pueden decir que van a conseguir imponer sus reclamos ‘por las buenas o por las malas’. Me quedé impactado por el nivel de desubicación y el léxico de sentirse dueños de algo que no es”, admitió.

“La posición del Ministerio (de Agricultura) es que si hay algún reclamo que tenga que ser atendido lo vamos a atender, pero es importante que se sepa que con las entidades del sector tenemos una relación de trabajo permanente", manifestó por su parte Domínguez desde Israel, donde se encuentra en visita oficial junto con el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, y un grupo de gobernadores. Subrayó que la cartera que conduce “a través de las cuatro entidades y del Consejo Federal de Ministros de todas las provincias tenemos un mecanismo de trabajo permanente y ya he dicho hasta el cansancio que las retenciones no se van a aumentar”, al mismo tiempo que aseguró que “el productor argentino no captó la renta inesperada, porque vendió su producción a precios preguerra y tiene que abordar la próxima cosecha con un aumento del costo de los fertilizantes del 60 por ciento”.