El vocero del Gobierno ruso, Dmitri Peskov, calificó este jueves como una "amenaza" el ingreso de Finlandia a la OTAN y prometió que Moscú "va a velar por su seguridad nacional" si finalmente el país escandinavo ingresa al bloque militar. Las autoridades finlandesas confirmaron horas antes que van a solicitar el ingreso a la OTAN "sin demora".

Según indicó Peskov, el presidente Vladimir Putin pidió "reforzar" militarmente las fronteras occidentales de Rusia en relación con los movimientos de tropas que realicen los países de la OTAN en la frontera oriental. "Serán elementos para un análisis especial y el desarrollo de las medidas necesarias para equilibrar la situación y garantizar nuestra seguridad", agregó el portavoz.

Anteriormente, el presidente de Finlandia, Sauli Niinisto junto a la primera ministra, Sanna Marin, había comunicado que "la membresía en la OTAN reforzaría la seguridad de Finlandia" y coincidieron en "solicitar el ingreso a la OTAN sin demora". Sin embargo, aclararon que todavía esperan que en los próximos días se aprueben "los pasos nacionales aún necesarios para tomar esta decisión".

Finlandia comparte una extensa frontera con Rusia y, en caso de sumarse al organismo internacional, los límites terrestres entre países de la OTAN y Rusia van a duplicarse, con 1.300 kilómetros extra. Los otros países nórdicos miembros de la OTAN son Noruega, Dinamarca e Islandia, desde 1949, mientras que Polonia lo es desde 1999, y Estonia, Lituania y Letonia desde 2004.

Por qué Finlandia y Suecia buscan abandonar su neutralidad

Finlandia y Suecia empezaron a prever la posibilidad de abandonar su neutralidad en favor de Ucrania y unirse al bloque bélico contra Rusia, tras el avance de las tropas rusas en el país de Europa del Este, y a las amenazas de Vladímir Putin.

A mediados de enero, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que ambos países nórdicos cumplían con los estándares de defensa de la OTAN y podrían sumarse al bloque.

Por su parte, Rusia anunció el 25 de febrero que respondería ante la posible admisión de Suecia y Finlandia en la OTAN.

Finalmente, la primera ministra finlandesa, Sanna Marin, aseguró a mediados de abril que su país estaba dispuesto a solicitar el ingreso en la OTAN si su seguridad nacional se veía amenazada.