La abogada de la madre de Arcoiris, Élida Barrera, recusó a la jueza de Menores Alicia Valdez por haber actuado con “parcialidad” en su contra, al momento de solicitar el paradero de la niña en junio pasado, y acusar a la letrada de no cooperar con la Justicia. Se trata de un incidente más en el proceso judicial que tiene en el centro a una niña, víctima de abusos sexuales y cuya madre tuvo que salir de La Rioja para lograr resguardar a su hija de sufrir nuevos episodios de abuso por parte de su abuelo paterno. Su salida de la provincia derivó en el allanamiento a la comunicadora Manuela Calvo, que se ocupa de visibilizar abusos sexuales en las infancias.

En la presentación, la abogada relata que “al tomar conocimiento de la situación puso a disposición de Asuntos Juveniles la presentación de la madre de Arcoiris que hizo ante la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia, que ordenó la prohibición de acercamiento del progenitor,  y los informes de Acceso a la Justicia con su dictamen que determinaron el caso de riesgo alto”.

La red feminista Justicia por Arcoiris afirmó la semana pasada que tanto su mamá Delfina, como la niña, no están prófugas, y al mismo tiempo pidieron a la Justicia riojana que proteja los derechos humanos de la niña. Sostiene que "el Poder Judicial de La Rioja desoye sistemáticamente los reclamos, denuncias y declaraciones de la mujer y la niña, que a los 2 años reveló los abusos sexuales que sufría por parte de su abuelo paterno".

Por medio de un comunicado difundido por la Función Judicial de La Rioja, la jueza de Menores sostiene que el 30 de mayo “se activó nuevamente la intervención de ese Juzgado por la disposición realizada por el Juzgado de Instrucción de Violencia de Género Nº2, por lo que como primera medida se dispone la escucha de la niña en audiencia privada en conjunto con la jueza civil, lo que no pudo concretarse por el traslado de la niña a otra provincia. Se le solicitó a la progenitora que envíe constancia policial del paradero de la niña, como justificación de su inasistencia, que a la fecha no fue enviado”.

“Es falso que desconoce dónde está la niña. Desde el 7 de junio tiene conocimiento de dónde se encuentra la menor, pero el domicilio específico está protegido debido a la situación de vulneración de la niña y su madre”, dijo Élida Barrera a La Rioja/12.

“La magistrada, con evidente saña, tergiversa los hechos imputándome situaciones que descalificó con pruebas. Asimismo, se desprende la evidente animosidad en mi contra con que escribe y desarrolla sus fundamentos”, expresa la presentación. Agrega además que “la magistrada incurre en violencia laboral e institucional de acuerdo a la ley 26845 de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres”.